La provincia de Málaga es la andaluza con más farmacias que venden online. Desde que el Ministerio de Sanidad dio luz verde a la venta de medicamentos sin receta por internet, un total de nueve boticas malagueñas se han decidido a vender por internet. En concreto, cuatro son de Marbella, dos de la capital y el resto, de la provincia. Granada, con siete, le sigue, y a la cola queda Huelva, con una.

Con esta medida, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) permitió en el verano de 2015 la venta de medicamentos de uso humano no sujeto a prescripción médica a través de internet. La aplicación DISTAFARMA, a través de la cual el Gobierno regula la actividad, permite que los ciudadanos que realicen estas compras puedan comprobar que lo hacen en una farmacia legalmente autorizada y que los medicamentos que adquieren tienen las necesarias garantías de calidad, seguridad y eficacia.

Con esta medida, la Agencia ha querido zanjar los problemas en torno a la venta a través de internet de medicamentos sin autorización y de las páginas web ilegales. «Estas son la principal vía de acceso de los pacientes a medicamentos falsificados, con el consiguiente riesgo para su salud», señalaron fuentes de la Aemps, que recuerda la existencia de un logotipo común para identificar los sitios web de la Unión Europea que vendan legalmente estos medicamentos.

A pesar de que ya hace un año y medio de la posibilidad de vender por internet, la cifra de farmacias que se han adherido es reducida y las ventas, mínimas. A pesar de ello, el goteo es constante, tal y como cuenta la titular de la farmacia Reding, Inocencia Camacho. «Todos los días nos llega algún pedido, pero no podríamos vivir de esto», señala la farmacéutica, que apunta a que creían necesario adaptarse a los tiempos porque cree que es «el futuro».

Con un pedido mínimo, los clientes tienen el medicamento en 24 horas y, en el peor de los casos, en 48. «No compran nada urgente porque para eso van a una de la calle, pero la gente hace como paquetes con todo lo que necesitan más a largo plazo», explica Camacho, que admite que muchas de sus ventas son de homeopatía, una especialidad de la que son expertos.

Pero en los sitios webs de las farmacias habilitadas solo será posible la adquisición de medicamentos no sujetos a prescripción médica, también conocidos como medicamentos sin receta, según estableció en 2006, la Ley 29/2006, de 26 de julio, de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios. Actualmente en España hay unos 1.235 medicamentos no sujetos a prescripción médica. Es decir, no pueden comprarse ni vacunas -por la trazabilidad- ni fármacos que precisen de prescripción médica con receta.

Fuentes del Colegio Oficial de Farmacéuticos apuntaron a que la medida no era «necesaria». «La red capilar de farmacias hace que haya una a 250 metros, por muy rápido que llegue online menos se tarda en ir a una abierta», señaló el secretario, Diego Rodríguez.

No obstante, mostró su apoyo a los colegiados que hayan emprendido este modelo empresarial online y recordaron que la venta ha de hacerse con coordinación, indicaciones del farmacéutico y un seguimiento de trazabilidad. Pero el Colegio se teme que esta medida suponga abrir la mano para que la especialidad farmacéutica publicitaria (los medicamentos de libre venta) salgan de la botica.

Además, creen que el papel del farmacéutico queda relegado a un segundo plano con la venta en internet. «La atención personalizada es muy importante. Se está banalizando y la economía está quedando por encima de la búsqueda de la salud real del paciente», apuntó, al tiempo que agregó que las farmacias se someten a controles exhaustivos mientras que otras empresas no.