Las lluvias caídas a consecuencia de las tormentas de la madrugada del domingo han dejado cifras históricas en Málaga. Según ha confirmado la Agencia Española de Meteorología ha confirmado que el pluviómetro del Puerto recogió 87,4 litros por metro cuadrado en una hora, la mayor intensidad nunca medida en la historia de la capital malagueña.

Según han señalado las fuentes, las mediciones recogidas en dos horas, 116 litros por metro cuadrado, son superiores a las de las inundaciones del año 1989, cuando se recogieron 112,5 en dos horas. Asimismo, han señalado que un colaborador de la agencia recogió en la zona de Cerrado de Calderón, con un pluviómetro manual, 190 litros entre las 3 y las 5 de la madrugada.

En lo que se refiere a los movimientos verticales, los rayos, las fuentes han admitido que la cifra cuantificada fue de 450 lo que constituye una situación anómala por el poco tiempo en el que se produjeron, "ha sido una situación muy extraordinaria", han afirmado.

Según la Aemet, lo sucedido en Málaga en la madrugada del domingo se conoce como Depresión a Niveles Altos (DANA). Esta llegó desde el Norte, con aire frío y al llegar a la zona mediterránea, se encontró con el viento húmedo de levante y temperaturas más altas, lo que hizo que se focalizara en la costa malagueña. En unos inicios descargó en la desembocadura del río Guadalhorce pero se desplazó en paralelo por la costa hasta la zona oriental de la ciudad, donde afectó, fundamentalmente, a El Palo, el Cerrado de Calderón y el Centro de la ciudad.

En lo que se refiere a la cercanía en el tiempo con las inundaciones del pasado 4 de diciembre, desde la Aemet admiten la proximidad de ambos fenómenos como algo inusual, aunque han recordado que en las inundaciones de 1989 se produjeron hasta cuatro distintas en un mismo mes dando lugar a incertidumbre y miedos a que se repitieran lluvias muy intensas, sobre todo porque los ríos iban entonces muy altos. No obstante, han recordado que en la provincia se suceden fenómenos así con cierta frecuencia, como en 2007 o 2012.

También han reconocido que lo sucedido en la madrugada del sábado al domingo fue una sucesión de tormentas, unidas, que hicieron que estas duraran más de lo normal y descargaran tanta agua.