Las cenizas del genial pintor Dámaso Ruano, fallecido en 2014, reposan desde ayer bajo la sombra de un ciprés en Parcemasa, en la zona conocida como el Jardín del Recuerdo. En una bella ceremonia, la familia depositó sus cenizas junto a amigos y acompañados de Juan Manuel Cabra de Luna, quien dijo unas palabras en recuerdo del fenecido, así como también hizo lo propio el arquitecto Salvador Moreno Peralta.
El Ayuntamiento aprovechó la ocasión para poner en marcha un pequeño dispositivo llamado IBeacon o Beacon, junto a la zona donde descansa ya el artista, para que toda persona que acuda con su móvil pueda incorporar a su dispositivo información sobre el artista, en este caso, cuadros seleccionados, artículos, entrevistas y lugares de Málaga con su obra.
La idea es extender esta iniciativa a otros camposantos con personajes conocidos de la ciudad como por ejemplo el arquitecto Fernando Guerrero Strachan, que descansa en el cementerio de San Miguel. Al acto también acudieron autoridades municipales y otros amigos del artista.
