La llegada de la primavera está marcada en rojo en el calendario de los malagueños. A algunos les gusta ver la provincia llena de color y otros se apresuran a buscar medicamentos contra la alergia. Sin embargo, también existe una buena parte de ciudadanos que con la llegada del mes de marzo temen la aparición de la procesionaria del pino.

El buen tiempo trae consigo las orugas que comienzan, poco a poco, a poblar los pinos de la provincia, estableciendo sus nidos en zonas como el CEIP Rafael Alberti o en el parque El Morlaco y dando lugar a una auténtica plaga. Ni la lluvia ni la bajada de las temperaturas son suficientes para luchar contra el conocido como «gusano del pino».

Este año el Ayuntamiento de Málaga vuelve a retomar la guerra contra la procesionaria, que se lleva a cabo a partir de octubre. Las principales herramientas empleadas por el Consistorio son los tratamientos que pretenden evitar la aparición de larvas. Para ello trabajan con productos químicos e insecticidas biológicos como el confeccionado a base de Belthirul, un compuesto con Bacillus Thuringiensis que se aplicó durante la segunda quincena de octubre y la primera de noviembre en los pinos del Alto de Olletas, los Jardines Picasso o el Monte Victoria. Estas actuaciones afectan a los 11 distritos de la ciudad en los que se han vertido más de 500 litros de insecticida, en algunas zonas.

La procesionaria aparece cada vez antes debido a la subida de las temperaturas y podría tener importantes consecuencias para los ciudadanos. El Consistorio malacitano es consciente de ello y desde hace dos años adelanta las actuaciones del área de Medio Ambiente dirigidas a este tema.

Actuaciones en los 11 distritos

Los tratamientos contra la procesionaria culminaron durante los últimos días del mes de febrero. «El plan consta de dos fases; una primera dedicada a la prevención que se lleva a cabo durante los meses de octubre y noviembre con el propósito de evitar que se depositen las larvas y un segundo periodo que se desarrolla durante los primeros meses del año y que corresponde a la fase curativa con la que se pretenden evitar las eclosiones, la aparición de orugas y la formación de nidos», explican fuentes del área de Medio Ambiente.

Solo en las zonas verdes del ámbito de la empresa de mantenimiento Talher se han tratado preventivamente en los últimos meses más de 500 pinos pertenecientes a los distritos de Cruz del Humilladero y Carretera de Cádiz, en los que no ha hecho falta aplicar el tratamiento curativo. Entre algunos de los emplazamientos tratados destacan el talud del campo de fútbol situado en la calle Litri, la biblioteca Manuel Altolaguirre, el Centro de Mayores Portada Alta o los colegios María Zambrano y Ciudad de Popayán. Asimismo, la avenida Moliere, el Parque Litoral o el Paseo Marítimo Antonio Banderas también han sido algunas de las zonas desinfectadas. En otros espacios como el CEIP Rafael Alberti, la calle Jorge Guillén, el parque Zoosanitario, el parque El Morlaco o el Vivero Municipal ha hecho falta volver a aplicar el tratamiento preventivo.

En lo que se refiere a las zonas correspondientes a los distritos 4, 5, 8, 9, 10 y 11, pertenecientes a la empresa Althenia, se han llevado a cabo actuaciones en la calle Eresma, donde se han tratado cinco unidades, o en el centro Municipal de la Corta donde los operarios municipales han trabajado en 3 árboles. Además, zonas como Las Nuzas, la calle Aljaima, los exteriores de la guardería Rincón de Torre Atalaya, la avenida Valle Inclán o el colegio Moreno Villa también se han convertido en lugares de trabajo. Según los expertos, el contacto con la procesionaria del pino podría ser letal para los perros y podría provocar graves consecuencias para las personas.

En este sentido, recomiendan desinfectar la zona de contacto con el gusano de inmediato ya que algunos de los pelos del insecto podrían quedarse en la piel. Los casos alérgicos leves se pueden tratar con crema corticoide. Sin embargo, en el supuesto de que la persona tenga dificultad para respirar o hinchazón de la cara será necesario acudir a un centro de urgencias para recibir corticoide intramuscular. Por este motivo las actuaciones en los centros escolares son de vital importancia.

Por otra parte, los que tienen mascotas deben tener especial precaución en las zonas en las que se pueden presentar este tipo de insectos debido a que podrían ser letales, especialmente, en el caso de los perros.

Regresa la lucha contra la procesionaria del pino. El Ayuntamiento de Málaga ya ha dejado entrever sus armas, ahora solo queda esperar a que florezca la primavera para comprobar si han funcionado.