Quien haya contemplado en primera persona el sufrimiento de un enfermo que sabe que va a morir, cuenta con una dolorosa experiencia que no olvidará jamás. La empatía se dispara y los cuidados cautelosos se convierten en clave cuando se entra en esa fase de transición que va desde la conservación de la vida al acompañamiento en la muerte. Con la intención de acompañar al ser humano en su último hilo de vida de manera pacífica, Andalucía fue una de las comunidades autónomas pioneras en el país a la hora de crear el registro de voluntades anticipadas. Desde entonces, el número de malagueños que han hecho uso de este registro ha ido en continuo aumento y, en 2016, ha cosechado un nuevo incremento del 16%.

Una tendencia al alza que ha colocado a la provincia en el primer puesto en el registro histórico, que se inició en 2004, y que ha llevado a un total de 8.084 malagueños a planificar de forma escrita las decisiones sobre los cuidados que desean recibir cuando las condiciones de salud no permitan expresarlo. Estas cifras corresponden al Registro de Voluntades Vitales Anticipadas que ha dado a conocer la Junta de Andalucía y llegan justo en el momento en el que el tema de la muerte digna ha vuelto ha entrar en el debate público.

Recientemente, ha sido rechazada en el Congreso de los Diputados una propuesta de Podemos que pedía la legalización de la eutanasia en España. Cabe señalar, en este punto, que la firma de la voluntad anticipada no tiene nada que ver con la eutanasia en el sentido de que al enfermo no se le brinda una ayuda activa para en su muerte. Pero sí persigue facilitarle a la persona en cuestión no tener que alargar la pulsión de vida de forma innecesaria.

Lo único que hay que hacer es rellenar el documento de voluntades anticipadas que está disponible online o en cualquier centro sanitario público o privado en Andalucía. En el documento se recogen las decisiones sobre los tratamientos médicos y cuidados de salud que desea cada persona para que el facultativo lo pueda consultar en el caso de que el estado de salud lo impida. Además, una vez llegado el fallecimiento, también se deja constancia sobre el destino deseado para el cuerpo y los órganos del mismo. En el documento de voluntades anticipadas se puede designar a un representante, quien asumirá la responsabilidad de velar que los deseos expresados sean respetados en todo momento.

Donde más se firman

Según los datos publicados por la Junta, la Delegación Territorial de Salud es el lugar preferido por los malagueños para firmar su voluntad anticipada, seguido por el Hospital Civil y el Centro de especialidades San José Obrero. El Hospital de Ronda, por la otra punta, figura en la cola de este ranking. El único requisito para poder formalizar el registro está en tener la mayoría de edad. También pueden rellenar el documento los menores de edad, a partir de los 14 años, con la asistencia de un tutor legal.