La huelga de las guarderías ha sido un éxito en la provincia de Málaga al haber alcanzado el 80% de participación, según han destacado los convocantes. Alrededor de 15.000 trabajadoras de los centros de infantil malagueños estaban llamadas hoy y mañana a dos jornadas de huelga consecutivas convocadas por los sindicatos para protestar contra el nuevo decreto autonómico que regula al sector. Y la gran mayoría ha optado por adherirse a los paros en contra de una medida que, como denuncian, envilece todavía más «las ya deficientes» condiciones laborales de los centros, donde la mayoría del personal sigue siendo femenino, con una cuota del 95%.

De hecho, la participación en Málaga ha superado holgadamente a la media andaluza, que se ha situado en el 70%, han informado los convocantes quienes, del mismo modo, han destacado la solidaridad de las familias, que en muchos casos han optado por no enviar a sus hijos a los centros escolares, apoyando implícitamente las reivindicaciones de las maestras y monitores.

También han criticado los servicios mínimos impuestos por la Junta de Andalucía ya que, a su juicio, "la Administración se ha lanzado a una campaña sucia intentando contrarrestar con malas artes la fuerza que iban a demostrar los trabajadores de los centros de infantil". Desde el punto de vista del sindicato CCOO, mayoritario en el sector, la Junta ha impuesto unos servicios mínimos "abusivos, que luego computará en las estadísticas como gente que no se ha sumado a la huelga".

La movilización, anunciada simultáneamente en toda la región, afecta en Málaga a un total de 299 guarderías ( 206 privadas, 80 municipales y 13 gestionadas directamente por la administración andaluza). Además, no se restringe al plantel educativo, abarcando también en su llamada a los equipos de comedor, limpieza y seguridad.

CCOO sostiene que la consecuencia directa de la aprobación del decreto será sacar las plazas a concurrencia competitiva, con rebajas de hasta el 15% sobre un coste por plaza que ya estaba en entredicho y sin revisar desde 2009. Como ya ha informado La Opinión de Málaga, el sindicato insiste en que la nueva norma establecerá asimismo y de forma «tácita» el llamado cheque escolar, «que fomenta la mercantilización de esta etapa educativa cuando la LOE y la LEA restringen las ayudas a la ausencia de ánimo de lucro». Ello conllevará, según CCOO, dificultades para las empresas más cumplidoras laboralmente y con plantillas más estables, pues se exigirá un esfuerzo aún mayor a su personal para poder competir y mantener las mismas condiciones, «facilitando un trasvase de alumnado que pondrá en peligro los empleos y su estabilidad al generalizar un situación de competencia desleal entre los centros y sus trabajadoras».