«La siniestralidad laboral sigue aumentando drásticamente, es la desoladora realidad que muestra el análisis del número de accidentes en el primer trimestre de 2017», aseguró ayer el secretario de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT Málaga, Francisco Javier Rodríguez, antes de ahondar en las actividades más relevantes de la economía de la provincia. «El dato de la totalidad de accidentes en jornada es de un 12,21% más este año que en 2016, lo que supone un total de 3.925, esta cifra por si sola ya es alarmante», añadió. En este sentido, UGT considera que lo que resalta es que el 30% prácticamente (1.171) esté relacionado con las actividades económicas más representativas de la provincia, que a priori no implican una gran peligrosidad. «Nos referimos a las actividades económicas de alojamientos, restauración, comercio al por menor y mayor, asistencias en establecimientos residenciales y actividades de personal doméstico. En estas actividades, los sobreesfuerzos físicos sobre el sistema muscoesquelético, bien por estiramientos excesivos o por trabajos repetitivos están a la orden del día, las caídas del trabajador, cortes, contactos con llamas o elementos de elevada temperatura, son entre otras, las formas más frecuentes de producirse el accidente».