Los sindicatos CCOO, UGT, CSIF y APFP (Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones) reclamaron este martes en Málaga al Gobierno central que abra una convocatoria extraordinaria para cubrir las vacantes existentes en prisiones y que frene las privatizaciones durante el inicio de las protestas en Andalucía.

«Que se abra la mesa de negociación y la convocatoria de una oferta extraordinaria de empleo», pidió en declaraciones a Efe el responsable estatal de Prisiones de CCOO, José María López, quien cifró en más de 3.000 los puestos de trabajadores de prisiones que quedan sin ocupar a nivel nacional.

López señaló que la convocatoria de empleo es «lo urgente» y que responde a los datos que el propio Ministerio de Interior reconoce, aunque consideró que ante un Gobierno «prepotente» que «no tiene la palabra negociación en su vocabulario» la plataforma sindical «tendrá que incrementar la presión». El sindicalista explicó que la situación en España es bastante homogénea y que «Andalucía está mal» y cifró en 8.000 el número de funcionarios de prisiones en la comunidad que han resultado afectados por las «pérdidas salariales» desde el último Gobierno socialista y también bajo el ejecutivo de Mariano Rajoy.

«Se trata de una respuesta a una falta de dignificación», indicó López, quien aseguró que el proceso de privatizaciones «se está agudizando» y reivindicó la recuperación de los derechos que les han «quitado» durante la «llamada crisis», y valoró que no es «un problema de color político».

En una concentración en la prisión de Alhaurín de la Torre a la que ha acudieron un centenar de personas, López -que forma parte de la plataforma sindical- auguró un «incremento de la presión» y avanzó que «los trabajadores están dispuestos a ello». También reiteró que si no se cubren las plazas «no hay servicio público» y que «a partir de que haya empleo podrán empezar a hablar de reivindicaciones más específicas». Entre las reivindicaciones destacaron «que es urgente que se apruebe una oferta de empleo y que se posibilite la apertura de nuevos centros como el de Archidona, Ceuta y Soria».

Los sindicatos señalan que además de la espera para que abra el centro de Archidona, la provincia tiene otros problemas en este ámbito, ya que consideran que tanto el centro de tercer grado como la prisión de Alhaurín de la Torre están saturados. Así, cifran en unos 40 los trabajadores que necesita la cárcel para dar la atención adecuada a los reclusos y recuerdan que el centro está preparado para 900 personas, pero acoge a más de 1.200. En una situación similar está el centro de tercer grado, que señalan que es el más saturado de todo el país.