­El PSOE de Málaga quiere evitar que el siguiente pulso, después de pasar el rubicón de las primarias, devenga en un nuevo enfrentamiento sonado entre los militantes que apoyaron la candidatura de Susana Díaz y los que apostaron por Pedro Sánchez. Este domingo el PSOE celebrará en todas las provincias del país congresos extraordinarios, conocidos en el argot militante como congresillos, para elegir a los delegados que acudirán al congreso federal de finales de julio, donde Sánchez será ratificado oficialmente como máxima autoridad del PSOE.

En el caso de Málaga, le corresponden 35 representantes y la derrota de Díaz ha dado alas a los sanchistas de la provincia, que ahora quieren verse representados en igualdad con los delegados susanistas. De hecho, en las diferentes agrupaciones de la capital y en la provincia ya se están produciendo movimientos por parte de ambos sectores. Ante este nuevo escenario de potencial conflictividad, el secretario de Política Institucional y número tres del partido en Andalucía, Francisco Conejo, quiso mandar un mensaje conciliador, asegurando que «es bueno que se produzcan acuerdos en todas las agrupaciones». Algo, que ha hecho extensible «tanto en las enmiendas que se van a presentar al congreso federal, como a la hora de elegir a los compañeros que acudan como delegados».

De las intenciones a la realidad, en todo caso, puede haber un trecho. Conejo repitió en varias ocasiones que la elección de los delegados no es algo que esté en manos de la dirección provincial sino que serán los propios militantes los que elegirán a sus representantes: «A nuestro juicio», siempre hablando en nombre de la dirección regional, «es la hora de que los militantes participen porque son ellos los grandes protagonistas y los que votan en las asambleas». En este sentido, apenas comentó de pasada que al congresillo del domingo, de cada agrupación, sólo irá un delegado por cada 40 afiliados. Este dato no es nada baladí, todo lo contrario, resulta clave si se tiene en cuenta que la afiliación en las sedes locales, sobre todo en los pequeños municipios, apenas rebasa esa cifra. En la práctica, esto significa que la dirección provincial tendría muchas facilidades para que el único delegado sea un militante afín a Díaz. Teniendo en cuenta que la presidenta ha sido la candidata más votada, estos militantes tendrán más facilidades de salir elegidos que un afiliado sanchista. De hecho, aunque fuera de forma velada, Conejo hizo valer esta lógica territorial al recordar el «apoyo mayoritario de los andaluces a Susana Díaz». Será este miércoles cuando se inicien las votaciones en las agrupaciones.

Sin respaldo explícito a Heredia

Preguntado, en reiteradas ocasiones, por el futuro del secretario general del PSOE en Málaga, que también lo es del grupo socialista en el Congreso, evitó mostrarle un respaldo directo. «La nueva ejecutiva federal decidirá el futuro de Heredia», se limitó a decir que «Heredia es un hombre de partido». Tampoco quiso entrar a valorar las posibilidades que existen de que Heredia se vuelve a presentar a la reelección en el próximo congreso provincial.