En cada pleno municipal de Málaga, los partidos presentan una moción para reclamar una actuación concreta, un proyecto para mejorar el mobiliario urbano, alguna propuesta de cara al futuro€ Todas son loables aunque a veces irrealizables en un plazo breve, como por ejemplo, el Bosque Urbano en los terrenos de Repsol, la solución del Guadalmedina y otros que requieren unas inversiones tan cuantiosas que no es posible llevar a cabo en poco tiempo. Algunas mociones, empero, pueden aceptarse y llevarlas a cabo en un tiempo prudencial.

Una de las mociones que me llamó la atención fue la que iba a presentar, y supongo que presentó, la que era portavoz del PSOE en Málaga, María Gámez, respaldada por la Asociación para la Defensa de la Imagen Pública de la Mujer. La petición formulada solicitaba que «una de cada dos calles que se rotulen, dedicadas a personas físicas, lleve el nombre de una mujer». Según la portavoz solo el siete por ciento de las calles tiene nombre femenino en Málaga. Gámez ya no es portavoz (¿o hay que decir portavoza?) porque dimitió del cargo.

Sin mencionar todos los nombres femeninos que hay en el callejero, y mucho menos demostrar si es el siete o el nueve por ciento, repaso calles rotuladas con nombres de mujer: Actriz Rosario Pino, Adela Quiguisola, Ana Bernal, Ángeles Molina Lezundy, Anita Adamuz, Aurora, Aranzazu, Azucena, Balbina Valverde, Margarita, María Guerrero, María Tubau, Marquesa de Moya, Duquesa de Parcent, Doña Enriqueta, Natalia, Escritora Fuster, Eva, Fátima y un largo etcétera con los nombres de santas y santos cristianos, terminando con las advocaciones de la Virgen María. En España, solo, hay más de veinte mil advocaciones de la Virgen. En Málaga no creo que lleguen al centenar las calles con el nombre de la Madre de Dios, que por cierto en Málaga hay una así rotulada. Cito algunas: del Carmen, del Perpetuo Socorro, de las Flores, de la Paz, Belén, Covadonga, Fuensanta, Estrella, Esperanza, Pilar, Amparo, Nieves€, sin olvidar a la patrona de Málaga, Virgen de la Victoria, ni a Santa Paula, martirizada en Martiricos junto a san Ciriaco.

Dentro de medio siglo

Desconozco si la citada asociación para la Defensa de la Imagen Pública de la Mujer ha confeccionado una lista de nombres de mujeres a proponer a la concejalía de Cultura, que es la competente en este asunto, con los nombres de mujeres malagueñas, españolas o extranjeras que deben incorporarse paulatinamente al callejero malagueño porque reunen merecimientos para tal honor.

Dentro de medio siglo, en Málaga, los nombres femeninos se impondrán a los masculinos porque las mujeres llevan varios años aventajándolos en los campos del saber, del arte, de la política, del deporte, de la Justicia, de la Medicina, de la Arquitectura y la política: por aquello de la paridad o cremallera, algunos partidos políticos siguen a rajatabla la política de la paridad: un diputado, una diputada; un concejal, una concejala y como dijo una exministra cuando era ministra, un miembro y una miembra, y lo último que oí no hace mucho por la radio, un héroe y una «héroa».

Entonces, por causas naturales, serán merecedoras a tener una calle, un pasaje, una plaza, una rotonda y una barriada a su nombre. Si me atrevo a fijar en cincuenta años el periodo en que la mujer supere al hombre en muchas manifestaciones de la vida, es porque la pléyade de mujeres que hoy se forma en la Universidad de Málaga está en primera línea en lo que respecta a notas, tesinas y tesis doctorales.

De esa masa femenina que viene empujando con fuerza y tesón saldrán nombres preclaros que hablen de tú a los alcaldes que les precedieron (hasta ahora solo ha habido una alcaldesa en Málaga, y no tiene calle), a los médicos (en el callejero hay más de cincuenta calles con nombre de médicos), a periodistas (en el momento presente solo tienen calle periodistas varones y en el panorama malagueño hay muchas mujeres periodistas que se harán acreedora en su día a tal distinción)€ El más reciente ejemplo de mujer malagueña merecedora de esa distinción es la médica fallecida en pleno desarrollo de estudios sobre en cáncer. La doctora Pilar Galera.

Nadie tiene la culpa que entre los grandes músicos de la Historia no haya mujeres de la talla de un Mozart, Beethoven, Rodrigo, Falla, Lehmberg, Ocón€, por citar extranjeros, españoles y malagueños; ni que en la pintura y escultura los hombres hayan ganado por goleada; ni que en la investigación todavía, con respecto a Málaga, no haya sobresalido una figura que a lo mejor hoy anda en los laboratorios de las facultades de Ciencias y Medicina trabajando en proyectos que pueden aportar soluciones a problemas relacionados con la salud, la alimentación, la informática€

Por cierto, cuando estaba redactando estas líneas, leí en estas mismas páginas de La Opinión la reseña de un libro escrito por Ángeles Caso titulado Ellas mismas, Autorretrato de pintoras en el que descubre dos pintoras españolas entre no sé cuantas extranjeras en los siglos XIX y XX. Una se llama Luisa Vidal y la otra Pilar Montaner. A la segunda no me importaría que le dieran una calle en Málaga; a la primera, no, porque es catalana. En Cataluña, concretamente en Gerona, había una calle con el nombre de Málaga hasta que un Ayuntamiento decidió eliminarlo. Ya está bien de hacer el panoli.

Yo estoy convencido de que dentro de unos años no habrá que buscar con lupa una mujer malagueña digna de tener una calle con su nombre; quizá lo difícil sea hallar a un hombre en las mismas condiciones. Eso de que haya que poner por acuerdo municipal una calle a una mujer por cada dos de un hombre me parece fuera de lugar, como la paridad en las listas electorales y en la composición de gobiernos, parlamentos, senados y directivas de un club deportivo.

Curiosidades de nuestro callejero

Por aquello de la ley de la Memoria Histórica muchas calles de Málaga han cambiado de rotulación; y se me antoja que se van a producir más cambios con o sin razón.

Pero dejando aparcado el asunto hasta más ver, en nuestro callejero vigente hay situaciones que mueven a risa, disgusto y cabreo. A mi particularmente me costaría trabajo mudarme a una calle rotulada Pepote, Tres del Pico, Callejones del Perchel, Pardillo, Tropezón y otras que resultan incómodas para los domiciliados en las mismas.

¿Y por qué mantener la calle Nueva, que es de las más viejas de la ciudad, el Camino Nuevo que tiene más años que Rita la Cantaora, que por cierto no tiene calle en Málaga pese a su fama; o Puerta Nueva, que tampoco en nueva sino antigua?

Quizás algunas abanderadas del feminismo estén insatisfechas por la rotulación de algunas calles, como las dedicadas a la graduación de la milicia: calle Sargento, Capitán, Comandante, Coronel€ Habría que rotular nuevas calles como Sargenta, Capitana, Comandanta y Coronela. Y lo machistas empedernidos quizá reclamen que lo mismo que hay calle llamada Beatas hay que rotular otra como Beatos. Paridad ante todo.

Unisex

Un elevado número de vías públicas de Málaga son unisex, como algunas peluquerías. Los nombres de ciudades (Barcelona, Córdoba, Granada, Sevilla€) no tienen género; tampoco tienen género los pueblos de la provincia, como Cómpeta, Árchez, Campillos, Antequera, Estepona, Benahavis€ Los países son tambien unisex, y en Málaga tenemos las calles Alemania, Chile, Bolivia, Argentina, Venezuela€

Y qué decir de los accidentes geográficos: Duero, Tajo, Guadalbullón, Guadiaro, Guadalete, Tajo, Esla€ No son ni machos ni hembras.

No sé qué corporación acordó dar el nombre de vinos de la tierra a una serie de calles. Tenemos Moscatel, Pajarete, Lágrima, Dulce Oscuro, Oloroso, Pedro Ximen, Málaga Negro, Seco Oloroso€ y de matute, Vermut, que no es malagueño. No solo aplaudo la idea sino que me premio de vez en cuando con un Pajarete, un Lágrima o un moscatel. Hay que hacer patria y secundar la campaña Sabor a Málaga.

Casi todas las flores están representadas en nuestro plano urbano: Claveles, Geranios, Dalia, Rosa, Pascueros, Boganvilleas€

La rotulación de las calles plantea problemas a mucha gente, sobre todo cuando se opta por elegir nombres de famosos no españoles, como músicos y pintores. Creo que esta iniciativa fue de Pedro Aparicio en su etapa de alcalde de Málaga. Melómano de primera línea pobló Málaga de nombres de músicos como Haydn, Chopin, Stravinsky. Haendel, Schubert, Beethoven..., glorias de la música pero de difícil ortografía.

Lo triste es que un Ayuntamiento, en su derecho y deber de distinguir a malagueños y no malagueños que sobresalieron en un época dándoles una calle, otro Ayuntamiento, veinte, treinta o cien años después, decida quitarles la calle para adjudicársela a otro persona o cosa. En Málaga, por desgracia, tenemos muchos malos ejemplos.