Un museo con escasa afluencia de público como excusa para explotar un restaurante y una tienda a precio de saldo en uno de los mejores edificios de la provincia. Eso es el verdadero trasfondo que esconde para el PSOE y Ciudadanos el Museo Taurino de Juan Barco, y es lo que ha motivado que sus portavoces en la Diputación, Francisco Conejo y Gonzalo Sichar, comparezcan por primera vez en lo que va de legislatura de forma conjunta. En la plaza del Siglo, con el Museo Taurino de fondo, ambos han pedido al equipo de gobierno del PP en la Diputación que emprenda el desalojo forzoso del espacio, tras constatar que Barco no actúa ante el requerimiento que se le hizo el pasado mes de abril para que abandone el edificio. Desde la apertura del museo, Barco ha acumulado una deuda importante con la Diputación por no pagar el canon establecido en la cesión demanial y por no satisfacer el pago del IBI y de la luz. En diciembre de 2016, la deuda fue cifrada por la propia institución provincial en más de 153.000 euros. "A mi espalda ven ahora mismo que el museo está cerrado, y así debería estar todos los días porque ese es el acuerdo adoptado por la Diputación. El señor Barco ya no tiene permiso para abrir este museo ni un minuto más. Sin embargo, abre el museo y lo está explotando económicamente", ha manifestado Conejo, añadiendo que el "PSOE y Ciudadanos piden que se aplique la normativa y se haga un desalojamiento forzoso, exigiendo los daños y perjuicios que correspondan para defender el interés de la provincia de Málaga".

En la misma línea se ha manifestado también Sichar, que ha insistido en que los continuos incumplimientos de contrato por parte de Barco justifican que se lleve a cabo "un desalojo administrativo". Sichar ha recordado, además, que, de entrada, el canon establecido para Barco ha estado muy por debajo de los alquileres que se mueven en una de las zonas de la provincia más caras: "El canon de 52.000 euros anuales nos parece que es irrisorio para como están los precios en la zona y, por lo tanto, supone una competencia desleal para los comercios de la zona". Cabe recordar que, actualmente, además del museo, sigue funcionando el restaurante ubicado en la terraza del edificio y una tienda de Toroshopping ubicada en los bajos del mismo. Los horarios de apertura, al margen de las del propio museo, harían indicar, según Conejo y Sichar, que se trata de una actividad secundaria que también incumple lo establecido en el pliego de condiciones.

"Desde el primer minuto que se hizo la cesión demanial, constatamos que se estaba utilizando la ubicación del Museo Taurino para albergar dos operaciones mercantiles, un restaurante y una tienda. Esa es la verdadera historia detrás de esto, la Diputación lo que quería era darle la concesión de un restaurante y de una tienda a un privado, justificándolo con que se iba a poner un marcha un museo", ha esgrimido el portavoz socialista. En este sentido, tanto Sichar como Conejo han dejado caer que el propio Barco podría estar subarrendando, a su vez, estos espacios del edificio en el que se encuentra en situación de okupa. "Después de comprar algunos productos en la tienda, se constató que factura Toroshopping. Nosotros, a día de hoy, no sabemos cuál es la situación contractual que tiene Barco con La Reserva (restaurante) y Toroshopping".

En este enrevesado escenario, Sichar ha precisado que ambos grupos defenderán que Barco pague por los "daños y perjuicios provocados, y por el enriquecimiento ilícito que está obteniendo durante estos meses en los que no ha pagado el canon". Por parte del equipo de gobierno del PP, está previsto que el diputado de Cultura, Víctor González, comparezca en el próximo pleno de la semana que viene para intentar clarificar la situación en la que se encuentra el Museo Taurino.