Todos los examinadores de tráfico de Málaga secundaron ayer la huelga realizada a nivel nacional, lo que provocó la suspensión de 240 pruebas de circulación y al menos otras 50 en pista cerrada, según los cálculos de los convocantes en la provincia. El 100% de la plantilla en activo (22 examinadores en la actualidad, ya que tres se encuentran de baja laboral) se sumaron a los paros ante la falta de respuesta por parte de la DGT a los problemas del colectivo, que vienen arrastrando desde el 2008 y que ya provocó también una huelga en 2015, que terminó resolviéndose con unos compromisos que finalmente no se han cumplido, según denuncian los trabajadores.

Estas protestas suponen el «colapso» de los exámenes en los meses de mayor demanda no solo en Málaga, sino en toda España, donde el seguimiento de la huelga alcanzó ayer el 90% (74% de media para la DGT y con un seguimiento bastante desigual) con unos 500 examinadores que no fueron a trabajar, lo que obligó a suspender más de 4.000 pruebas prácticas en el territorio nacional.

José Luis Conde, portavoz de los examinadores malagueños, recordó ayer que los paros están previstos durante todos los lunes, martes y miércoles, de los meses de junio y julio, de modo que solo se examinará con normalidad dos días por semana. Esto puede suponer que cada semana podrían dejar de examinarse de conducir en la provincia unos 720 alumnos y otros 250 en pista. «Este es el calendario actual, pero ya se está pensando en lo que vamos a hacer a partir de septiembre», explicó Conde.

La anterior protesta, convocada el pasado 2 de junio, fue secundada por más del 90% del colectivo y obligó a suspender 7.000 pruebas prácticas en toda España, según los representantes de los trabajadores.

El pasado jueves, el director general de Tráfico, Gregorio Serrano, se reunió con el comité de huelga, pero sus propuestas no sirvieron para desatascar el conflicto, toda vez que no admitió la subida del complemento específico, una de las principales demandas de los examinadores.

El colectivo demanda la escasez de plantilla, unos 700, 200 menos que antes de los recortes (en Málaga se ha pasado de 35 examinadores a 25 en pocos años), y la continua fuga de funcionarios por las condiciones que se imponen desde la administración.

Los examinadores ya estuvieron en huelga en 2015, protesta que terminó con un acuerdo con la DGT que -según denuncian- no se ha plasmado ni en relación con los complementos retributivos ni en la mejora de las condiciones de seguridad a la hora de entregar los resultados.

Para tratar de paliar los efectos de esta convocatoria de huelga y dar respuesta a los alumnos que integran las listas de espera para poder examinarse, la Mesa Delegada de Tráfico, integrada por la Dirección General de Tráfico (DGT) y sindicatos con representación, se reunirá durante el día de hoy para analizar la situación de los examinadores de tráfico y la posibilidad de incorporar personal militar, de tropa y marinería, para cubrir estos puestos.

Según fuentes de la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra), las plazas que podrían ser cubiertas por este personal militar podría estar en unas «300 como poco», pues según aseguran en 2009 eran más de 900 trabajadores y a día de hoy son unos 600.

Al respecto, fuentes de la DGT puntualizaron a Europa Press que «hay muchos puestos abiertos a funcionarios del Estado» por lo que, como afirman «no es la primera vez que se abren determinadas plazas a otro tipo de funcionarios que no sean de tráfico», como en su momento se hizo con Correos o Defensa. No sería, por tanto, «algo nuevo».

Este martes tendrá lugar una nueva jornada de huelga y el miércoles, otra.