Astilleros Nereo entra en el plan nacional de patrimonio industrial

Los veteranos astilleros entran así a formar parte de una lista que en Málaga capital y provincia cuenta con tres elementos más: Intelhorce, la Real Fábrica de Hojalata de Júzcar y los altos hornos de Marbella y en el resto de Andalucía, con hitos del patrimonio industrial como los astilleros de Puerto Real, la Bodega González Byass de Jerez 0 el paisaje minero de Riotinto.

El Plan Nacional de Patrimonio Industrial se justifica por «la necesidad de protección y conservación de un patrimonio que, por su propia especificidad, presenta un rápido deterioro y está expuesto a desaparecer», indica el propio plan.

Una de las fases previstas de esta iniciativa a nivel nacional, tras la elaboración de un inventario general, es la realización de estudios y actuaciones «para el conocimiento y documentación del bien para la declaración de BIC», entre otros aspectos. Además, también contempla iniciar con las comunidades autónomas planes de protección.

En el caso de Astilleros Nereo, la paradoja es que la Dirección General de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía incorporó en 2005 en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Actividad de Interés Etnológico la carpintería de ribera realizada en los astilleros pero no protegió el sitio en el que tienen lugar estas actividades.

La cuestión ahora es si esta inclusión en el Plan Nacional del Patrimonio Industrial afectará al famoso plan de reforma de los Baños del Carmen, que contempla que un paseo marítimo trazado en línea recta pase por mitad de los astilleros, previo rescate de la concesión administrativa, que Nereo ostenta desde hace más de medio siglo, 1966. ¿Se puede rescatar Nereo y derribarlo?

Nuevo intento de rescate

Precisamente, la Dirección General de Costas ha iniciado un nuevo intento para rescatar la concesión de Astilleros Nereo, después de que en el expediente de caducidad del anterior intento de rescate se recomendara la incoación de un nuevo trámite.

Este paso no deja de ser un trámite administrativo, en tanto que viene obligado por el anterior proceso y condicionado al hecho de que la propia concesión se extingue en 2018. Además, la negociación entre Costas y los Astilleros Nereo para una posible reubicación sigue abierta, pese a la insistencia de estos últimos de mantener su emplazamiento tradicional.

Sobre el hecho de que la actividad esté protegida por el Plan Nacional de Patrimonio Industrial del Ministerio de Cultura, queda en manos de Costas realizar una consulta al Ministerio sobre cómo afectaría al mantenimiento de la actividad en la ubicación actual, ya que no queda claro si la protección afecta solo a la actividad o también a la actual emplazamiento. En todo caso, de mantenerse allí, sería mediante un nuevo proceso de concesión de la actividad, en la medida en que el actual se acaba en menos de un año.

«Me parece una obcecación»

Para Francisco Rodríguez Marín, profesor de Historia del Arte en la Universidad de Málaga y experto en Patrimonio Industrial, la inclusión de Astilleros Nereo en este plan nacional, con independencia de la protección efectiva a sus instalaciones, «indica que para el Ministerio de Cultura, los Astilleros Nereo son uno de los elementos del Patrimonio Industrial, a nivel nacional, más importantes». Por este motivo, el profesor declaraba este lunes que continuar con el rescate para derribar los astilleros «me parece una obcecación que roza la más completa ignorancia».

Rodríguez Marin consideró sin justificación alguna mantener el trazado recto del paseo marítimo, y recordó que también se planteó inicialmente un trazado recto en el paseo marítimo de Poniente, que demolía las chimeneas «y las alegaciones a Cultura de asociaciones lograron que el trazado fuera curvilíneo para salvar las dos chimeneas más próximas al mar: la de los Guindos y la Cross».

«Que en el lado opuesto se vaya a hacer justo lo contrario no se entiende», recalcó.

Integrar los astilleros

Alfonso Sánchez-Guitard, de Astilleros Nereo, declaró a este diario que el Plan Nacional de Patrimonio Industrial supone un importante respaldo a la supervivencia de los astilleros, porque va más allá de proteger la actividad y protege las instalaciones. «Lo lógico es que Costas contacte con la comisión de seguimiento del plan para integrar Astilleros Nereo», argumentó.

Es más, el responsable de Nereo señaló que si Costas sigue adelante con el rescate, estaría cometiendo «expolio» al intentar acabar con un elemento del Patrimonio Industrial, reconocido por el Ministerio de Cultura.

«La ley deja muy claro que los bienes del patrimonio histórico, estén o no catalogados, hay que protegerlos, y en este caso, el propio Estado ha incluido los astilleros en el plan para catalogarlo», subrayó.