Dos jóvenes de 25 y 29 años han sido detenidos en Málaga como presuntos responsables de sendos delitos contra la libertad sexual investigados por la Policía Nacional de forma independiente. Según ha informado la Comisaría Provincial de Málaga, las pesquisas se iniciaron tras las denuncias de las víctimas. Una de ellas manifestó haber sido agredida sexualmente por un hombre poco después de conocerlo en una sala de baile de la capital el pasado 14 de agosto. La supuesta agresión tuvo lugar en el interior del establecimiento y un amigo de la denunciante se enfrentó al agresor para que desistiera de su acción.
En otro caso distinto, en un inmueble de la zona oeste, otra mujer denunció haber sido atacada por un vecino que subió con ella en el ascensor. Según esta versión, al llegar a una de las plantas del edificio la sacó por la fuerza al rellano y la agredió sexualmente. Los hechos se produjeron el día 17 de agosto y en ellos intervino una tercera persona, un vecino que socorrió a la víctima al oír sus gritos y que provocó que el agresor huyera. Los agentes han logrado identificar y detener a los dos presuntos autores de los hechos como responsables de un delito contra la libertad sexual.
Detenida por fingir un robo en una supuesta agresión sexual
Por otro lado, la Policía Nacional también ha detenido en Málaga a una mujer de 42 años y nacionalidad colombiana por su presunta responsabilidad en un delito contra la administración de justicia. Según las pesquisas, la investigada fingió supuestamente la sustracción de dos teléfonos móviles por dos hombres que intentaron sobrepasarse con ella sexualmente. La investigación concluyó que no se produjo el robo de los teléfonos y dejó también en entredicho la supuesta agresión sexual.
En su denuncia, la mujer manifestó haber sido abordada en el interior de un vehículo en el polígono Guadalhorce. Siempre según su testimonio, dos hombres habían intentado abusar de ella, sin llegar a conseguirlo, ya que logró zafarse de ellos. No obstante, los agresores se hicieron con su bolso, que contenía dos teléfonos móviles y sus respectivas tarjetas SIM, entre otros efectos. Las contradicciones de la supuesta víctima despertaron las sospechas de los investigadores, que, tras sus pesquisas, confirmaron cómo esta usó los teléfonos en fechas posteriores a su denuncia. Los agentes constataron cómo dos números de abonado, a nombre de la denunciante y que obtuvo con anterioridad al asalto y que no fueron denunciados, fueron insertados en los terminales para operar con los mismos. Los investigadores se llegó a la conclusión de que no se produjo el robo inicialmente denunciado. La supuesta víctima ha sido detenida por su presunta responsabilidad en un delito de simulación de delito.
