La Junta de Andalucía decidió ayer reabrir a los usuarios de la Ciudad de la Justicia el parking de 260 plazas que, hasta julio, era usado por todo el público, y que a mediados de agosto la gerencia del edificio decidió que sólo pudieran ser usadas por jueces, fiscales, letrados de la Administración de Justicia, funcionarios, personal de mantenimiento, seguridad, limpiadores y otros colectivos que trabajan diariamente en la infraestructura, lo que excluía a letrados, procuradores, graduados sociales, abogados del Estado, periodistas, peritos, justiciables, testigos, etcétera. El aparcamiento se reabre aunque hay restricciones: hasta julio podía ser usado hasta por personas que no iban al edificio y que trabajaban cerca o vecinos, incluso. La novedad de la reapertura es que podrá ser usado por todos los usuarios del palacio de justicia, es decir, quienes trabajan allí y quienes van al edificio, pero no por el público en general.

«El aparcamiento exterior de la Ciudad de la Justicia volverá a abrirse públicamente para que los usuarios de la misma puedan aparcar libremente mientras desarrollan sus labores en las dependencias judiciales», explicó la Junta. Así se acordó tras una reunión mantenida entre el delegado del Gobierno andaluz, José Luis Ruiz Espejo, y el decano del Colegio de Abogados, Francisco Javier Lara, que acudía también en representación del Colegio de Procuradores y la gerente de la Ciudad de la Justicia, Rosario García Morilla.

De esta forma, el aparcamiento dispondrá, por medidas de seguridad, de una zona reservada para los trabajadores de la Ciudad de la Justicia, jueces, fiscales, etcétera... y otra zona de libre acceso para los usuarios de la misma, como operarios judiciales (abogados, procuradores) y personas que asistan a actos judiciales.

La gerente encargará de forma inmediata a una empresa que implemente las medidas necesarias para delimitar la separación de ambas zonas de aparcamiento, de forma que la semana que viene pudiera estar operativo ya el aparcamiento con esta distribución.

Igualmente, en la zona de libre acceso se habilitarán letreros indicando que el aparcamiento está destinado a aquellas personas que vayan a desarrollar alguna actividad en el edificio, de forma que se produzca la necesaria rotación de coches para facilitar el aparcamiento de todos aquellos que lo necesiten.