La Comisión de Cultura del Ayuntamiento ha aprobado esta mañana por unanimidad solicitar (que no instar) al equipo redactor del Plan Director de la Catedral que informe a los grupos de la oposición sobre el contenido del documento; asimismo, se ha acordado instar a la Junta de Andalucía a que se culmine el expediente para la inscripción de la sillería del coro en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, como Bien de Interés Cultural (BIC) -ya lo es pero no ha sido concluida la carpetilla- y manifestar la gran preocupación del Consistorio "por la posibilidad de que los bienes culturales del patrimonio catedralicio" puedan verse afectados por posibles actuaciones, así como también se reclama que "se garantice el máximo cuidado y protección y que no sean modificados, adaptados o trasladados" sin que se respete la ley.

Toda esta polémica surge a colación de que el Obispado considerase que el coro es molesto para algunos tipos de culto. Málaga para la Gente se dio cuenta de que, pese a ser un BIC, la sillería del coro no ha sido inscrita aún en el Catálogo General del Patrimonio Histórico andaluz, es decir, no se ha culminado el expediente y, en puridad, no está protegido.

Remedios Ramos, edil de la federación de izquierdas, ha sido contundente: "No podemos estar al albur de las opiniones del obispo" y ha destacado que la diputada nacional Eva García Sempere ha preguntado al Gobierno si conoce el borrador del plan director y si tiene conocimiento de que se ha planteado la modificación o traslado de la sillería del coro de la Catedral. También se ha preguntado al Ejecutivo central si se va a terminar el templo mayor de la ciudad. "Es de suma importancia proteger la sillería", ha dicho.

La sillería del coro data del siglo XVII y fue iniciada por Ortiz de Vargas, una obra que culminó el gran Pedro de Mena, "hecho que la revaloriza", dice Málaga para la Gente en su moción. Considera la colación que el traslado a otro espacio podría afectar "al patrimonio cultural catedralicio de todos los malagueños".

Los dos primeros puntos han sido aceptados por todos los grupos sin problemas: es decir, pedir a la Junta que lo inscriba ya como BIC en el catálogo, que es como estará protegido; y que no sean alterados o modificados los elementos culturales de la Catedral de forma contraria a la ley. Gemma del Corral, edil de Cultura, ha destacado que "no es tan fácil modificar un BIC, ni en el contenido ni en el continente, ya que está protegida por la Ley de Patrimonio de Andalucía". "No estamos preocupados por que el obispo pueda hacer lo que quiera con lo que hay dentro de la Catedral porque lo prohíbe la ley", ha apuntado.

El tercer punto instaba al equipo de gobierno a que informara a la oposición del plan director, pero Del Corral ha recordado que este proyecto no está impulsado por el equipo de gobierno, sino que se trata de "un diagnóstico que depende del Obispado y de la Junta de Andalucía, que es la que debe velar por que el proyecto se ajuste a la ley". Por tanto, ha hecho una enmienda para sustituir el verbo instar por hablar con el equipo redactor, como Ayuntamiento, con el fin de que los arquitectos informes a la oposición municipal del proyecto.

"No somos quiénes para instar al Obispado o al equipo redactor para que informe de esto, propongo hablar, solicitar en nombre del Ayuntamiento de Málaga al equipo redactor que informe del plan director de la catedral y sus anexos", ha añadido.