La Unidad especializada en Hostelería de la Policía Local de Málaga ha denunciado en apenas nueve meses de funcionamiento a 159 bares y restaurantes por ocupar con sus terrazas la vía pública, frente a las 136 del mismo periodo del año anterior (+16,9%). En 108 de esos casos se trató de terrazas ilegales decir, que no contaban con autorización (frente a las 104 de 2016); y en 51 de las veces fue por ocupar más superficie de la permitida con mesas y sillas (frente a las 32 del pasado ejercicio).

Otros motivos de denuncia se debieron en 59 ocasiones a carecer de declaración responsable (43 en 2016) y otras 55 se cursaron por carecer de seguro de responsabilidad civil (51 el año pasado). Tal y como explicó ayer en rueda de prensa el edil de Seguridad, Mario Cortés, se le ha dado la vuelta a la forma de trabajar, de forma que se ha puesto la lupa sobre los bares y restaurantes que reiteran sus incumplimientos y se ha visitado menos a los negocios que suelen tener sus papeles en regla. Hay menos inspecciones pero aumenta la eficacia sancionadora, porque, sobre todo, se ha pasado a actualizar diariamente la base de datos de 1.022 negocios que hay en el Centro Histórico -zona en la que se ha centrado la primera fase experimental del nuevo método de trabajo-. Además, dijo Cortés, se han mejorado las vías de comunicación con las áreas implicadas: Medio Ambiente, Seguridad, Vía Pública y Movilidad, de forma que se está pensando incluso en extender esta forma de trabajar a otros campos como el control de mascotas o el ruido.

Así, las inspecciones a establecimientos en regla han caído de 589 entre enero y septiembre de 2016 frente a las 257 de 2017.

Cambio de metodología

«El objetivo de dicho cambio de metodología es incrementar la eficiencia de la labor policial en lo que se refiere a recursos empleados y resultados obtenidos, dedicando esfuerzos sobre los establecimientos que cuentan con un historial previo de incumplimientos a las ordenanzas y resto de normativa específica, evitando, además, con ello, la duplicidad de inspecciones a los negocios que acatan las leyes en la materia que les incumbe», dijo el edil, que estuvo acompañado en la rueda de prensa del superintendente de la Policía Local, José Fernando Cerezo, y del intendente responsable de la unidad, José Luis Martín.

De cualquier forma, el concejal quiso dejar claro que todos los establecimientos van a ser inspeccionados cuando toque, así como también ocurrirá esto cuando un vecino llame a la policía para quejarse.

Según señaló Cerezo, «la Policía Local tiene obligación de cumplir las ordenanzas, actuamos por un problema concreto o cuando llama un vecino. En esos casos es inevitable intervenir y pedir la documentación, porque estamos obligados a intervenir de manera preventiva, pero las inspecciones de locales con todo en regla han bajado y hay más denuncias para los incumplidores».

Señaló Cerezo que la idea es también que cada área se vaya coordinando y comunicando cada vez mejor.

Cortés también destacó que esto también contribuye a que la percepción del ciudadano y del vecino sobre las terrazas mejora. «Hemos puesto la solución no en los datos cuantitativos, sino en los cualitativos, es decir, buscamos comprobar si arreglamos el problema». También se hace un seguimiento de las quejas para ver si estas están fundamentadas o son, por el contrario, infundadas y, por tanto, no basadas en hechos fehacientes, lo que también sucede algunas veces.