Sabor a Málaga, la marca creada por la Diputación para promocionar y dar visibilidad a los productos de la provincia, suma una pieza prestigiosa. San Miguel, cerveza con profundo arraigo en Málaga, se ha sumado a un club que no deja de crecer. Ya son más de 700 empresas y establecimientos que se encuentran bajo este paraguas promocional que fue creado allá por 2012. La escenificación del pacto se desarrolló en la propia fábrica de la cervecera. Acudió el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, para un apretón de manos simbólico con el director del centro, José Manuel Huesa. Además, se procedió al intercambio de una placa que ya ejerce en la sala de visitantes como distintivo. El máximo responsable de la institución provincial resaltó el «orgullo» que le produce que San Miguel se adhiera a Sabor a Málaga. «Lleva más de medio siglo implantada en la ciudad y está plenamente integrada entre nosotros», dijo. Aprovechó la ocasión para resaltar la trayectoria adquirida por Sabor a Málaga. De una vaga idea a sello con fuerza que, según Bendodo, ha contribuido a que «el 80% de los productores adheridos a la marca han logrado incrementar sus ventas desde que se unieron a la misma».
Huesa, en su intervención, resaltó el compromiso de San Miguel con Málaga y aseguró que esta nueva colaboración no hace más que «reflejar nuestra implicación con la provincia». «Somos un producto cien por cien malagueño y estamos orgullosos de reflejarlo, uniéndonos a la familia de productos de Sabor a Málaga», añadió.
Etiquetado especial
Algunos de los formatos más populares de la cerveza llevarán un etiquetado especial que muestre el logo de Sabor a Málaga. Serán, en un principio, los botellines retornables de un tercio y de un quinto. La historia de San Miguel en Málaga se remonta casi a la época del blanco y negro. El centro, en su actual ubicación, se levantó en 1966. Además de ser patrocinador oficial de la Feria de Málaga desde 2008, también mantiene un acuerdo con el equipo de fútbol de la capital y promociona diversas actividades.
