El proyecto de macrourbanización de la zona de Rojas Santa Tecla, en Churriana, una de las grandes apuestas urbanísticas del equipo de gobierno del alcalde, Francisco de la Torre, salvó ayer uno de los trámites administrativos más importantes antes de que comiencen las obras y se expidan las correspondientes licencias. El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó en su edición del martes el acuerdo del pleno del pasado 31 de marzo por el que se aprueba de forma definitiva el plan parcial de ordenación de la enorme pastilla de terreno, ubicada en Churriana. La notificación de este acuerdo se produjo el pasado 3 de octubre.

La macrourbanización prevista en la zona abarca una superficie de 1,48 millones de metros cuadrados, en los que se contemplan 2.847 viviendas y un campo de golf de 18 hoyos, que ocuparía una superficie de medio millón de metros cuadrados. También se han previsto 330.353 metros cuadrados para zonas verdes de uso público, 45.960 metros cuadrados para centros educativos, 46.992 para zonas deportivas y sociales y dos parcelas para uso comercial que suman 46.992 metros cuadrados.

El proyecto ya fue aprobado definitivamente en 2009, pero una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ratificada por el Tribunal Supremo (TS) frenó en seco el plan ya que los magistrados entendieron que no se analizaba suficientemente los recursos hídricos de la zona y si estos podrían bastar para el enorme desarrollo previsto en este suelo. Sin embargo, el edil de Urbanismo, Francisco Pomares, informó en julio de 2015 de que la Delegación de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta emitió en enero de 2014 un informe favorable al uso de recursos hídricos en la zona, por lo que se garantizaría el abastecimiento del sector.

«Indica que el consumo actual más todos los probables recursos que se puedan consumir con los planeamientos de desarrollo más las innovaciones informadas por la Administración andaluza del agua no superan los 60,45 hectómetros cúbicos al año autorizados por el Plan Hidrológico y por el informe de disponibilidad de recursos del PGOU», dijo. Por tanto, y después de varios intentos por parte del equipo de gobierno de sacar adelante el proyecto, siempre con el rechazo expreso de la oposición municipal, se pudo aprobar definitivamente el plan de ordenación en el pleno de 31 de marzo tras incorporar el estudio positivo de la Junta, ya que fue el único punto que pusieron en solfa los tribunales, porque sus resoluciones no afectaban a los planteamientos técnicos del planeamiento en sí.

El Ayuntamiento, antes de su aprobación definitiva en el pleno, también pidió consejo a la asesoría jurídica municipal y esta certificó que, una vez resuelto favorablemente el «vicio que determinó la nulidad parcial del plan» puede retrotraerse el procedimiento al momento de la aprobación provisional, que tuvo lugar en 2009, y en consecuencia volver a presentar un nuevo acuerdo a aprobación definitiva. Finalmente, en el pleno del último día de marzo de 2017 el Ayuntamiento, tras haberlo intentado por última vez en 2015, logró desbloquear uno de los grandes proyectos urbanísticos de la ciudad con el apoyo de Ciudadanos, aunque toda la oposición volvió a votar en contra.

Más trámites

En el BOE, por tanto, se notifica la aprobación definitiva del plan parcial de ordenación y se da cuenta del informe hídrico de la Junta, además de advertir que la ejecución de uno de los viales queda supeditada a la solución definitiva que le dé Fomento en el proyecto «Mejoras de Seguridad Vial de la Autovía de Torremolinos a Málaga». Asimismo, y antes de que se dé la licencia de obras, es necesaria una resolución favorable por parte de la Dirección General de Aviación Civil, dada su cercanía al aeropuerto y en el proyecto de urbanización habrá de constar un plan de prevención ambiental.