La Subdelegación del Gobierno en Málaga, el Ayuntamiento de la ciudad, el Cuerpo Nacional de Policía y la Cruz Roja han mantenido este sábado una reunión para abordar la problemática generada en las últimas horas por la llegada a la ciudad de numerosos inmigrantes rescatados cuando trataban de cruzar el Estrecho en pateras.

En apenas 48 horas, Salvamento Marítimo, Guardia Civil y Cruz Roja han rescatado y atendido a 175 personas desembarcadas en el puerto de Málaga, las cuales pasan a disposición de la Policía Nacional primero y del juzgado después, en virtud de la Ley de Extranjería que regula la entrada irregular de personas en territorio español.

Así, Subdelegación ha establecido un protocolo de comunicación y coordinación "más efectivo" entre las instituciones y se han tomado medidas concretas dentro de las previstas ya en los convenios que mantiene el Gobierno con distintas entidades, con la puesta a disposición de infraestructuras municipales en caso necesario y la colaboración permanente de las ONG.

El subdelegado del Gobierno, Miguel Briones, ha anunciado en un comunicado que la próxima semana se celebrará otra reunión para evaluar estas medidas y adoptar otras si fuera necesario, ya que se va a convocar también al Colegio de Abogados de Málaga y a la Autoridad Portuaria.

También ha destacado que el procedimiento está establecido y la Policía Nacional, una vez cumplimentado, "no puede retener" a estas personas, destacando el "excelente trabajo hecho en cumplimiento estricto de la legislación vigente".

A la reunión que ha tenido lugar en la Subdelegación ha asistido el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre; la directora general de Derechos Sociales, Participación Ciudadana, Inmigración y Cooperación al Desarrollo, Ruth Sarabia; el comisario principal jefe provincial del CNP en Málaga, Francisco López Canedo, y el coordinador provincial de Cruz Roja, Samuel Linares.

En la misma se ha abordado la situación generada ante las numerosas personas que este año están siendo rescatadas en toda la costa andaluza, y que en el caso de Málaga ronda ya los 1.900 inmigrantes entre hombres, mujeres y menores, una cifra aún sin consolidar pero que dobla ya la del pasado año.