El Sindicato Andaluz de Bomberos (SAB) de Málaga denuncia que el Ayuntamiento no activara el Plan Municipal de Emergencias (PEM) durante la borrasca Ana en la capital. El temporal, anunciado por Aemet desde el sábado con el nivel naranja (riesgo importante) por rachas de viento de 90 kilómetros por hora que finalmente alcanzaron los 100 en la zona del puerto y el nivel amarillo por lluvias, produjo importantes daños y a punto estuvo de provocar una desgracia con la caída de ramas y grandes árboles (una mujer resultó herida en la Alameda Principal). A pesar de la excepcionalidad del fenómeno y el riesgo real que supusieron, el Ayuntamiento aseguró el lunes que el PEM se activa solo «sólo cuando las condiciones son extremas» y que ese día estaba "todo controlado". El decreto municipal por el que se activa la mesa de coordinación en la que participan los jefes de Bomberos, Policía Local y Protección Civil señala, sin embargo, que éste se debería poner en marcha de forma parcial cuando «la situación aconseje estar alerta ante un hecho o riesgo previsible que podría desencadenar una situación de emergencia».

El sindicato mayoritario de los bomberos cuestionan esa decisión por varios motivos, el principal por la situación de "emergencia real" que suponía el temporal. Tras recordar que Sevilla, con el mismo nivel de alerta que Malaga, sí activó su Plan Municipal de Emergencias, el sindicato explica que en la capital no se adoptó ni una sola medida adicional a pesar de que "más de 40 situaciones de emergencia colapsaron el servicio". "Árboles, ventanas, alumbrado navideño y todo tipo de objetos cayeron a la vía pública sembrando el caos en la ciudad", han explicado en un comunicado en el que consideran que los criterios para la activación del PEM "resultan dudosos y caprichosos", más cuando hoy mismo sí se ha activado para el simulacro que se está realizando en el puerto. "Estamos ante algo insólito, un verdadero despropósito que muestra la ausencia de criterio en la gestión de la seguridad de la ciudad, en este caso por el concejal de Seguridad, Mario Cortés; el jefe del servicio, José Cruz; y el propio alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, por mantenerlos.

Recuerdan que en septiembre sí se activó durante el incendio de una nave de reciclaje de cartón "y se intentó localizar al personal de descanso a pesar de que la situación estaba bajo control". "Los bomberos de descanso que no acudieron por causa justificadas como encontrarse fuera de la ciudad, estar al cuidado de sus hijos, e incluso los que ni si quiera descolgaron el teléfono se enfrentan a posibles penas de prisión por abandono del servicio y denegación de auxilio por no incorporarse, y esto cuando no existe ninguna norma o reglamento que obligue a los bomberos a estar atentos al teléfono, sin cargas familiares y sin salir de la ciudad las 24 horas del día, los 365 días del año", han añadido.

No es la primera vez que los responsables municipales no activan el PEM provocando polémica. Tras la madrugada del 19 de febrero, cuando una tromba histórica de agua descargó más de 144 litros por metro cuadrado en apenas dos horas que provocaron el caos de los servicios de emergencia, el Ayuntamiento dijo que no la activó porque todo ocurrió muy rápido y se centraron en atender los daños, aunque lo cierto es que la tromba fue evolucionando a lo largo de toda la noche pasando por los niveles amarillo, naranja y rojo. Su no activación provocó entonces que la oposición criticara en bloque al equipo de gobierno, que en cambio sí adoptó la medida parcial en agosto ante la alerta naranja anunciada por la Aemet por fuertes lluvias.