­Dos mil personas (entre pacientes, familiares y cuidadores) se benefician cada año del convenio entre el Hospital Virgen de la Victoria y la Fundación para Cuidados del Cáncer (Cudeca) sobre la atención integral a personas con enfermedad avanzada que ya se viene desarrollando de forma conjunta desde hace años por ambas entidades y que ayer fue rubricado de nuevo.

El director gerente del centro, José Antonio Medina, la directora gerente y responsable médico de Cudeca, María Luisa Martín; así como la directora del área de Atención a la Ciudadanía, Evaluación y Seguridad del Paciente de este hospital, Lourdes Rayas, se reunieron en el centro para formalizar el convenio de colaboración para mejorar la atención integral de este tipo de pacientes, así como servir de apoyo técnico y emocional a sus familiares y cuidadores.

De este modo, el acuerdo se marca como objetivo prioritario «la mejora de los cuidados paliativos a las personas en situación de enfermedad avanzada y soporte para sus familiares».

Para esto, Cudeca aporta un equipo de apoyo para cuidados paliativos en el ámbito de la atención domiciliaria del área poblacional de referencia del hospital, y que se encuentra integrado por médicos, enfermeros, psicólogos y trabajadores sociales de nutrida experiencia en este ámbito de la atención.

Además, y como novedad este año, la Fundación Cudeca, con el apoyo técnico y logístico de la Fundación la Caixa, ha incorporado un nuevo profesional para prestar apoyo psicológico precoz a los pacientes y a sus familias, y que ya se encuentra trabajando junto al equipo de Cuidados Paliativos del Hospital Virgen de la Victoria para atender las necesidades psicosociales de los usuarios.Un psicólogo

En este sentido, el nuevo especialista en Psicología Clínica ha atendido ya a lo largo de este año un total de 180 pacientes y 355 familiares y cuidadores. Asimismo, esta atención psicosocial está complementando la actividad sanitaria y no sanitaria de los equipos de paliativos con los que cuenta el Hospital Virgen de la Victoria para potenciar de este modo la atención integral a las personas al final de su vida, precisaron.

En esta línea de colaboración, se están llevando a cabo diversas funciones para el desarrollo del programa, como atención psicosocial a pacientes y familiares con necesidades de atención paliativa y/o situación de final de vida, atención a familiares en situación de duelo, apoyo a profesionales y colaborar con el fomento activo del voluntariado, así como aquellas otras que eventualmente se puedan contemplar en el programa.