El Grupo Municipal Socialista recuerda que, durante la Navidad, la gente suele comprar artículos pirotécnicos, "sin tener en cuenta el grave problema que pueden ocasionar". A la hora de tirarlos, no se tienen en cuenta "los riesgos para los más pequeños, ya que cada vez son más los que se lesionan y tienen que acudir a los servicios de urgencia de nuestros hospitales para su cura". El PSOE pide más sensibilidad con los petardos para con las mascotas, las personas mayores y los niños. El grupo ha pedido al alcalde por carta que haya mayor control en el uso de petardos.

"También se producen daños auditivos de gran importancia para las personas que explosionan el petardo, como los que se encuentran junto a ellos. Daños para las personas con problemas de corazón, que también se ven afectados. Se está llegando a no tener en cuenta ni siquiera las zonas de especial protección como son las que se encuentran próximas a centros sanitarios, guarderías, colegios, parques infantiles, residencias de mayores y otras de análogas características", dicen.

También hay que acordarse de los mejores amigos de los humanos, dice el PSOE, los perros, "quienes sufren de especial manera el efecto de los petardos. Los dueños de los animales también han alzado la voz para criticar el uso de este material explosivo, que cada año va en aumento". Así, se ha enviado por parte del grupo una carta al alcalde, Francisco de la Torre, pidiendo acciones y un mayor control en el uso de petardos, así como la comercialización en centros no oficiales y la venta a menores.

"Pedimos cordura y mesura a la ciudadanía, entendemos que hay tradiciones navideñas que deben cumplirse, pero debemos hacerla sin causar trauma o problemas a nuestros vecinos y animales, en lo que entendemos normas básicas de convivencia", asegura el grupo, para insistir en que el PSOE es quien introdujo en la nueva ordenanza municipal de bienestar, protección y tenencia responsable de animales una "modificación relativa a evitar la realización de actividades en el entorno privado que pueda alterar o perturbar el bienestar psíquico de los perros, tales como ruidos excesivos, explosión de petardos y otros supuestos análogos".