­El Teléfono de la Esperanza es una asociación sin ánimo de lucro que trabaja en Málaga desde hace 45 años. El objetivo es atender a personas en situación de crisis a través de un teléfono (952 26 15 00) que está activo las 24 horas del día durante todos los días del año sin excepción. Los voluntarios reciben una formación de año y medio y se les enseña cómo escuchar y empatizar con los afectados. Juan Sánchez, presidente de la organización, cuenta a La Opinión de Málaga cuáles son los entresijos de esta asociación y cómo los voluntarios trabajan a diario para ayudar a las personas.

¿Cómo forma el Teléfono de la Esperanza a los voluntarios?

Se forman durante un año y medio. En primer lugar lo que se pretende es realizar un curso para el conocimiento de uno mismo. Es difícil empatizar con el otro si primero no te conoces bien. Tras éste, realizan otro curso de desarrollo personal. Hay otro seminario que se llama Cómo ayudar a otros. Asimismo se hace un seminario para el aprendizaje de la escucha. Los voluntarios deben empatizar con la persona que llama. Estamos muy acostumbrados a oír pero no a escuchar.

¿Qué papel juega el Teléfono de la Esperanza en nuestros días?

La gente necesita que se le escuche y que haya una voz amiga que sintonice con sus problemas y con esas situaciones que no son capaces de compartir con nadie. Desde el Teléfono de la Esperanza nunca se aconseja. Lo que hacemos es que las personas sean capaces de evaluarse a si mismas, de hacer un tránsito en su vida para conseguir superar los problemas.

¿Qué tipo de personas llaman?

Hemos tenido en el pasado 2017 unas 7.000 llamadas en Málaga. De estas llamadas, sobre todo los problemas psicológicos y psiquiátricos han ocupado gran parte del espectro. Han sido unas 2.700 llamadas de este tipo. Los problemas relacionales y familiares han sido el segundo repunte con unas 1.300 llamadas. Y luego problemas asistenciales 93, problemas jurídicos 79. Sobre todo los problemas psicológico y relacionales son los que más han abundado.

¿Y qué tipos de problemas psicológicos son los que se suelen dar?

Los más comunes son los de falta de autoestima, falta de autonomía propia. También nos encontramos con problemas de rupturas amorosas o con la pareja. Problemas que están condicionados con ideas suicidas, como los laborales, problemas relacionados con la drogadicción, el alcoholismo...

¿Cuántos casos de suicidio llegan al teléfono?

Este año hemos aumentado mucho las llamadas. El año pasado tuvimos 120 llamadas de este tipo. Creemos que éste es un problema silenciado. Es la primera causa de muerte no natural en España ahora mismo, dobla el número de muertes por causa de accidente de tráfico. Hay que darle voz. Creemos que al igual que se establecen políticas de prevención de, por ejemplo, accidentes de tráfico, y hay programas de sensibilización para el público, habría que hacerlo con el suicidio.

¿Cree que se crearán políticas de prevención del suicidio?

No sé, pero nosotros ahora hemos presentado ante el Congreso un proyecto no de ley, apoyados por UPN (Unión del Pueblo Navarro), para que se haga una ley de prevención del suicidio a nivel nacional. Aquí somos especialmente sensibles con este tema. No queremos que se haga propaganda sensacionalista en torno a este asunto pero consideramos muy importante que se expliquen las causas que pueden motivar a una persona a querer quitarse la vida.

¿Cómo tratan ustedes este tipo de casos?

Pues es complicado, a veces incluso hemos recibido llamadas de suicidios en curso. Cuando hay una persona que llama con estas intenciones el voluntario lo que trata es de acompañarlo en ese momento y preguntarle claramente si lo que pretende es suicidarse. El que se suicida no quiere morir, lo que quiere es dejar de sufrir, y nuestra misión es, a través de nuestro servicio telefónico y presencial, dar a esa persona razones para vivir.

¿Han conseguido evitar algún suicidio en curso?

Lo hemos conseguido y además varias veces. Hablando con la persona afectada podemos hacer que acceda finalmente a informar sobre su situación y que podamos hacer algo al respecto. Alguna vez, con el paso de los días, han visitado la sede para darnos las gracias por haberles ayudado.

¿Tienen algún servicio paralelo a la atención de problemas?

Por supuesto. El teléfono es más que la atención a crisis. También estamos dedicados a la salud emocional. Con esto me refiero a que atendemos a personas que no están en crisis y lo único que quieren es que les enseñemos cómo pueden mejorar, conocerse a si mismos... Esto lo hacemos a través de cursos y talleres que realizamos en la misma sede.

¿Qué importancia tiene la salud emocional?

Es muy importante. El miedo es un aspecto muy introducido en nuestras vidas y provoca consecuencias muy negativas tanto en nosotros como en lo que nos rodean. Por todo ello es importante la salud emocional, conocernos a nosotros y nuestro comportamiento.

@mdmedinadeharo