El Consejo de Gobierno de la Universidad de Málaga (UMA), reunido ayer en sesión extraordinaria, aprobó un total de 187 plazas de profesorado, lo que constituye la mayor oferta de empleo público destinada a personal docente e investigador de los últimos tiempos.
En total recibió el visto bueno del Consejo la creación de este número de plazas para titulares y contratados doctores, a las que hay que sumar 132 de ayudantes doctores -personal laboral con contratos de un máximo de cinco años-, que están pendientes de autorización por parte de la Junta de Andalucía.
La UMA tendrá ahora tres años para ir dotando estas plazas, según han informado en un comunicado. En previsión de este incremento de plantilla, los presupuestos de la institución académica han incluido cinco millones más en gastos de personal, que alcanzan los 159 millones de euros. Las cuentas para este año ascienden a un total de 254 millones, han recordado.
Con esta oferta de empleo público la UMA busca dar mayor estabilidad a su plantilla «y acabar con la precariedad laboral en algunos colectivos». La medida fue defendida en el Consejo de Gobierno por la vicerrectora de Personal Docente e Investigador (PDI), Yolanda García Calvente.
«Con esta oferta empieza a despejarse el horizonte de plantilla docente que dejaron las directrices gubernamentales marcadas en 2012 y 2013, años en los que tan sólo se autorizó la sustitución de un diez por ciento de las bajas definitivas de profesorado», apuntaron, recordando que en los dos años siguientes la tasa de reposición se subió al 50 por ciento, «y desde 2016 ya se permite la contratación del cien por cien».
Esta realidad se combina con distintos cambios legislativos que han permitido la promoción a catedrático de 74 profesores y el paso a titulares de 72 contratados, han manifestado. Por otra parte, el Consejo de Gobierno también dio luz verde al reglamento de configuración de y funcionamiento de las bolsas de trabajo de personal de administración.
