Manuel Vides acaba de incorporarse al cuadro de especialistas médicos, una nueva etapa profesional que afronta con «bastante ilusión» y en la que pone a disposición del paciente toda su experiencia, enfocada sobre todo en pacientes jóvenes y deportistas que requieren de una recuperación completa al cien por cien para retomar su actividad con absoluta normalidad.
Acaba de incorporarse al cuadro de especialistas médicos de Hospiten
Lo afronto con bastante ilusión. Mi idea a la hora de dar este paso es realizar aquello que me gusta siempre a favor de los mejores resultados. Ofrecer a los pacientes mi mejor trato y calidad de asistencia.
Una de sus especialidades es aplicar la técnica artroscópica, ¿en qué consiste?
Nace con la intención de intentar disminuir la lesión quirúrgica. Son pequeñas incisiones de menos de medio centímetro por donde se introduce material específico dentro de las articulaciones, una cámara especial que sirve para hacer un diagnóstico inicial dentro de la articulación y, a partir de ahí, tratarlo a través de otras incisiones. Con ello se consigue disminuir el dolor postoperatorio, se acortan tiempos de recuperación, estancia y mejoran los resultados funcionales y estéticos.
¿Qué tipo de pacientes se pueden beneficiar de esta técnica?
El tipo de pacientes que habitualmente se trata con esta técnica es joven deportista con lesiones en rodilla y hombro. Las lesiones meniscales, de ligamento cruzado o de cartílago de rodilla. En el hombro las más características son las lesiones de luxación recurrente, conocidas como inestabilidades de hombro, y en una franja de edad mayor las lesiones del manguito rotador que es el nombre que recibe el conjunto de tendones del hombro que se pueden reparar mediante artroscopia. También hay otras lesiones menos frecuentes de tobillo, codo y cadera que se pueden tratar.
¿Qué más aborda en su día a día?
Mi ámbito más frecuente de tratamiento es, sobre todo, patología de rodilla y hombro, mediante artroscopia. Igualmente, llevo a cabo otras intervenciones como implantación de prótesis de rodilla y cadera. A nivel más general, abordo fracturas y urgencias traumatológicas.
¿Cuál es el perfil del paciente que acude a su consulta?
Frecuentemente atiendo a deportistas con lesiones que ya no le permiten realizar su actividad con normalidad. Son pacientes que requieren de un tratamiento específico e integral y a los que hay que asegurar al máximo su recuperación porque van a demandar volver al cien por cien y esto no permite un resultado intermedio. Este tipo de paciente es un reto y hay que intentar restaurar su situación previa a la lesión por completo.
¿Qué papel juega la prevención?
Es importantísima y sobre todo en el deporte. Últimamente vemos algunas actividades deportivas más de moda como carreras continuas, maratones o medias maratones y hay mucha gente que realiza este tipo de actividades pero no han sido asesorados adecuadamente en el uso del calzado, la técnica de carrera, la superficie... Esto aumenta de manera exponencial las consultas en Traumatología por lesiones de este tipo. Es importante saber de dónde parte uno y ponerse en manos de un profesional que le ayude antes de empezar.
El crossfit también está de moda y muchos expertos advierten sobre posibles lesiones.
También aparecen por consulta pacientes que practican crossfit. En esta modalidad deportiva se realizan ejercicios de alta intensidad en muy poco tiempo. El riesgo está en la aparición de lesiones por sobrecarga en estructuras tendinosas y musculares. Hay pacientes que ya tienen de base alguna patología previa o cierto grado de degeneración que puede dar lugar a roturas tendinosas, como las del tendón de aquiles o cuadricipital.
¿Hacia dónde están encaminadas las técnicas actuales y futuras?
La tendencia en general de toda la cirugía es llevar a cabo técnicas quirúrgicas menos invasivas para obtener el máximo beneficio. Por otra parte, se está intentando ser cada vez más respetuoso con la biología del paciente e incluso ayudando a la formación de nuevos tejidos como el cartílago para implantarlo utilizando células propias. Por ahí va el futuro, la mínima agresión, obtener la curación sin tantos implantes y siempre ayudado de la tecnología. Ya se usan brazos robóticos o la navegación, ordenadores para guiar gestos quirúrgicos.
Hospiten está reforzando su apuesta por el área de Traumatología, ¿cómo lo ve?
Mi impresión es muy positiva. Apuesta por las personas, por el avance y las nuevas tecnologías. Intenta destacar gracias a la aplicación de las mejores terapias buscando siempre la mejora y el beneficio para el paciente.
