Más de 40 enfermeros y enfermeras de toda España han participado en un curso de prácticas avanzadas que ha impartido la coordinadora del cuidado de la Unidad de Gestión Clínica de Intercentros de Reumatología de Málaga, Laura Cano, a nivel nacional junto con la Sociedad Española de Reumatología. Una formación pensada para que los hospitales implanten el modelo que desde 2013 se lleva a cabo en el hospital Carlos Haya,a través del cual se ofrece un mejor servicio al paciente mediante la gestión compartida entre el reumatólogo y la enfermera.

La fórmula que aplica en esta área el hospital Carlos Haya consiste en la derivación de pacientes por parte del reumatólogo a la enfermera para tener un mayor control sobre revisiones, subidas de dosis u otras cuestiones relacionadas con el seguimiento de los pacientes. Una atención que no suele ser presencial, por la dificultad para acudir al centro hospitalario por lejanía o discapacidad por parte del paciente, y que gestiona la enfermera a través del teléfono, correo electrónico y contacto directo con el centro de salud al que acude el paciente para tener acceso a información como los controles analíticos. Un servicio que ya se lleva a cabo en otras áreas como los anticoagulados o los enfermos de diabetes, según informó Laura Cano, también coordinadora del curso que se ofreció en Madrid.

Los pacientes que reciben terapias biológicas y están en tratamiento para abordar enfermedades inflamatorias autoinmunes como pueden ser lupus, artritis reumatoide o psoriásica son los que más se benefician de este servicio que se lleva a cabo desde hace casi cinco años. Requieren de unos fármacos que obtienen mediante dispensación hospitalaria y su seguimiento es indispensable para ver cuál es la respuesta inmune del paciente.

En la actualidad, el Hospital Regional cuenta con ocho médicos reumatólogos y una enfermera para realizar la gestión compartida de los pacientes que gestionan día a día.