El grupo municipal socialista denunció ayer que una inspección del Cuerpo Nacional de Policía al Jardín Botánico-Histórico de la Concepción en la madrugada del dos de marzo ha desvelado «graves problemas de seguridad» en el recinto, lo que el PSOE achaca a la permanente realización de pliegos «de contratación por debajo de los costes reales del servicio desde hace tiempo».

La concejala socialista Lorena Doña, que visitó hace pocos días el jardín junto a los también concejales Salvador Trujillo, Sergio Brenes y Begoña Medina, señaló que «varios agentes se personaron en la madrugada del dos de marzo en el recinto municipal para evaluar las medidas de seguridad del mismo, evidenciando en el acta la actuación negligente del Consistorio», y destacó que ya en julio de 2017 los trabajadores adscritos al servicio denunciaron «la precariedad de las funciones que prestan debido a la aceptación de bajadas temerarias en el presupuesto por parte del Ayuntamiento, lo que imposibilita dar un servicio acorde a las necesidades».

Aspectos del acta de inspección

El inspector de policía que realizó la inspección destacó en su acta, según explicaron los socialistas, que no se estaba prestando servicio armado, pese a ser obligatorio por la noche, «así como que sólo un vigilante se ocupaba de todo el recinto y de la actividad de mismo, sin usar uniforme; además, las alarmas no funcionaban, así como tampoco los botones de pánico instalados en el jardín, debido a que el servicio no está al día de pago con la empresa suministradora». Tampoco funcionan las ocho cámaras de seguridad. Se trata de un recinto con 23 hectáreas y trece edificios.

La concejala aclara que, además de estas cuestiones, los trabajadores han presentado a través de sus representantes sindicales de UGT diferentes denuncias «a la Junta de Contratación, advirtiendo de manera reiterada de dichos problemas, a los que hay que sumar que no se han realizado los reconocimientos médicos a los miembros del personal, tampoco se ha aportado un coche eléctrico al servicio, como recoge el pliego, y se ha producido el impago de diferentes nóminas a los empleados, así como también a algunos trabajadores que están de baja».

Doña insistió en que, «lamentablemente, existen demasiados ejemplos que nos vienen dando la razón cuando denunciamos la apatía de este equipo de gobierno a la hora de licitar estos servicios de una manera correcta y acorde a los baremos necesarios, como ha sucedido con la Sociedad Municipal de Aparcamientos y Servicios de Málaga (Smassa), los museos municipales, los informadores turísticos o los servicios de vigilancia en las dependencias municipales».

Los socialistas también destacaron otro hecho que califican de «significativo» en este conflicto: el pasado 27 de marzo, explicaron, tuvo que acudir un funcionario e la Policía Local para clausurar el Jardín Histórico-Botánico al no ir ningún vigilante de seguridad a las instalaciones para realizar el turno de noche.

Doña exigió al concejal de Sostenibilidad Medioambiental del Ayuntamiento de Málaga, Raúl Jiménez (PP), que «actúe con cordura y proteja la joya que supone la finca de la Concepción para la ciudad de Málaga. No podemos caer en la precariedad en la dación de servicios públicos y, mucho menos, poniendo en peligro el patrimonio de todos los malagueños y malagueñas».

El jardín cerró 2017 con 47.608 visitantes de pago, el mayor número de esta categoría que registra el Botánico desde 1995, año en el que se vendieron 48.148 entradas. Esa cifra ha dado lugar, a su vez, a la mayor recaudación obtenida por La Concepción en su historia, con unos ingresos por este concepto de 174.10 euros, frente a los 143.525 euros de 2016.