«El asma es una de las enfermedades crónicas más prevalentes del mundo. Afecta a todas las edades y es muy importante el diagnóstico correcto». Bajo esa definición y con especial hincapié en la importancia de diagnosticar a los pacientes de manera certera, la investigadora María Salas explica cómo el Hospital Civil, perteneciente al complejo del Hospital Regional, asume desde enero, y durante los próximos tres años, una investigación pionera centrada en aquellos pacientes que no dan positivo en las pruebas cutáneas y de sangre pero que podrían sufrir la enfermedad a nivel local.

«Les vamos a hacer un test de provocación bronquial, una prueba muy específica que no se hace de manera rutinaria», explica la coordinadora del proyecto Estudio de los mecanismos inmunológicos implicados en el asma alérgica local, en el que participan también profesionales del Ibima, el Fisevi de Sevilla, el Hospital Universitario Virgen de la Macarena y el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca.

Con una subvención de algo más de 66.000 euros, esta investigación se centra en mejorar los tratamientos y, en definitiva, la calidad de vida de un perfil muy determinado. La idea parte de incorporar una nueva prueba para aquellos que no dan positivo en las pruebas convencionales pero que a través de una directa en sus bronquios sí podría verificarse la existencia de asma a nivel local, lo cual supondría la inclusión de tratamientos más personalizados e incluso la aplicación de inmunoterapia, en los casos que sea de procedencia alérgica. «Es la única herramienta que ha demostrado que puede variar el curso de la enfermedad, que no vaya a más e incluso que vaya hacia atrás», explica la coordinadora. Un hecho que se ha demostrado que sufren los pacientes con rinitis al presentar el mismo cuadro (no dan positivo en las pruebas convencionales) y en los que se ha diagnosticado la enfermedad a través de una prueba de provocación nasal. «El 30 por ciento de los pacientes con rinitis pueden tener asma», explica Salas.

En este primer año se reclutará a pacientes y se estudiará la prevalencia, hasta ahora desconocida. El segundo año se quiere destinar al estudio de las respuesta inmunológicas subyacentes que presenta esta tipología y el último sería para terminar el estudio y ver si se verifica lo que los investigadores creen. « La enfermedad puede no estar a nivel sistémica pero sí local. Para eso hacemos la prueba de provocación bronquial», reitera la investigadora. «Nuestro objetivo final es mejorar la calidad de la vida de los pacientes y tener herramientas que nos ayuden a ser más correctos y específicos ya que los vamos a poder tratar mejor», matiza.

La prevalencia de esta enfermedad en España es del 1 al 5 por ciento, mientras que en niños y adolescentes va del 8 al 20 por ciento, según indicó María Salas. Además, supone entre el 1 y 2 por ciento del gasto sanitario en los países europeos.

Andalucía cuenta en la actualidad con seis proyectos con esta enfermedad crónica como protagonista, uno de ellos en Málaga, y con un presupuesto total de 230.000 euros, según la Delegación de Salud. En cuanto a estudios clínicos, la región cuenta con 40 estudios; diez de ellos en Málaga, repartidos entre el Regional (5) y el Clínico (5).