El proyecto CaixaProinfancia del programa la Obra Social la Caixa cumple 10 años ayudando en Málaga a casi 29.500 menores y 16.611 familias en situación de pobreza. Hasta el momento, el proyecto ha destinado en su programa un total de 58 millones de euros. Tan solo en 2017, se dedicaron 6 millones de euros y para este 2018 el importe aumentará a 6,4 millones de euros. Este proyecto atiende las diferentes necesidades de los menores de entre 0 y 18 años en situación de exclusión social.

De entre sus servicios destacan el refuerzo educativo, el apoyo educativo familiar, la atención psicoterapéutica, así como el ocio y tiempo libre. Además de estos aspectos, la entidad se encarga de ofrecer a los menores y familias cheques para cubrir necesidades escolares o cheques para gafas. De estas, el 49% de las ayudas son de refuerzo educativo, mientras que el 22% de ocio y tiempo libre, seguidas de la alimentación e higiene (15%) y la atención psicoterapéutica (12%)», expresó Marc Simón, subdirector general de la Fundación Bancaria la Caixa.

Junto a él, Juan Ignacio Zafra, director territorial de CaixaBank en Andalucía Oriental; Raúl Jiménez, concejal de Derechos Sociales del Ayuntamiento y Albertina González, gerente de la entidad INCIDE, presentaron ayer el balance de datos del programa en la provincia a lo largo de estos 10 años. «El volumen de atención en Málaga-Torremolinos durante el 2017 fue de 7.611 niños y 4.452 familias, de las cuáles, el 44% eran familias monoparentales mientras que el 56% biparentales», destacó Simón.

La media de permanencia en el programa es en Málaga de 4,5 años, acogiendo el año pasado a 1.282 niños nuevos (17%) y manteniendo a un total de 6.250, (82,98%). En este sentido, solo el 6,3% de los niños que asisten a este programa abandona la ESO prematuramente, mientras que el 81,2% consigue promocionarse en la etapa educativa que les corresponde. Por otro lado, la media de ayudas que recibieron el año pasado los menores se cifra en 3,09 mientras que las ayudas por familia se sitúan en 4,91. En este sentido, la media de aportación económica durante este mismo año por niño fue de 789,95 euros, y por familia de 1.350 euros, siendo destinados para 2017 un total de 6 millones de euros.

En cuanto a las mejoras, la entidad afirma que el 76% de los participantes mejora su rendimiento escolar mientras que el 93,4% promociona a ESO al finalizar la primaria. Asimismo, el 65% de los participantes mejora en la adquisición de competencias como la comunicación y el lenguaje.

Con motivo de su décimo aniversario, el proyecto celebró ayer en la Casa Diocesana un encuentro en el que reconoció a familias, entidades e instituciones que han estado trabajando durante estos años en el proyecto. Un evento que contó con la mentoría del actor malagueño Salva Reina.

Los reconocimientos se dividieron en diferentes categorías como Superación Personal, que fueron otorgados a siete jóvenes malagueños, o Empoderamiento familiar, donde se reconoció a Carmen de Haro, abuela de la familia De Haro, y a dos padres, Águeda Muñoz y Miguel Ángel Fernández, que a pesar de sus difíciles trayectorias, han estado siempre muy implicados en el proceso educativo de sus hijos.