La red social Twitter ha servido a Alejandra Warwitz para denunciar un suceso que se produjo ayer en unos de los autobuses de la empresa de transportes EMT. Por la mañana, esta joven que cursa segundo de Fisioterapia se disponía a volver a casa en el autobús de la línea 22 cuando éste no pudo ofrecer sus servicios a uno de los clientes. "En la parada de la Facultad de Ciencias había un chico con movilidad reducida. La rampa de autobús no funcionaba y el chico no podía subir", asegura Warwitz.

La rampa de acceso para discapacitados no estaba disponible y el joven, acompañado por una amiga, no obtuvo respuesta ni ayuda "por parte de nadie para acceder al autobús". "El conductor les dijo que o se esperaban al siguiente autobús, o que ella, sola, intentara subirlo a peso", expresa la joven que, presenciando lo sucedido y ante la "pasividad de los presentes", decidió bajar para ayudar al chico.

"Intentamos subirlo entre las dos, pero era como un peso muerto y con la silla incluida, era imposible. Más tarde apareció una chica por la calle que nos ayudó a subirlo. Primero a él, sin la silla y luego, la silla", incide Wawitz que además señala que las tres estaban "bastante preocupadas" ya que "al no poder moverse ni hablar" pensaban que "montarlo sin silla en uno de los asientos del autobús podría ser un problema para él".

"Estuvimos al menos unos 15 minutos para poder subirlo, con la presencia tanto del conductor como de el resto de pasajeros sin hacer absolutamente nada, me pareció increíble, no podía creermelo. Quise quejarme por Twitter porque me parecía una buena vía aunque no esperaba que tuviera una repercusión tan grande", destaca la joven. En este sentido, la joven apunta que "la mayoría de gente que estaba en el autobús era mayor y una gran mayoría tenían la fuerza suficiente para echar una mano".

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Ante su denuncia a través de la red social, la empresa de transportes ya se ha disculpado y ha solicitado los datos convenientes a la joven para retirar el vehículo de circulación. "Se han puesto en contacto conmigo y se han disculpado. Además. han retirado el vehículo que al parecer tenía ya 16 años de antigüedad", apunta Warwitz.

Respuesta de la empresa

Por su parte, la EMT asegura que la rampa no funcionaba en esa parada debido a las obras de la avenida Louis Pasteur. "El asfalto está levantado y esto impedía que la rampa pudiera salir", asegura Miguel Ruíz, gerente de la EMT que además expresa que "precisamente debido a estas obras, la parada está anulada". En este sentido, el gerente también destaca que hay "un cartel en la parada que señala cuál es la próxima parada disponible".

"El conductor ni si quiera tenía porqué parar allí, y paro al ver que había gente y en este caso, un discapcitado. Él solo quería hacer un bien, pero estaba parando el tráfico en un lugar de estacionamiento en el que no debía estar, no podía bajarse", apunta Ruíz que además añade que "se les avisó de que esperaran al próximo autobús, pero se negaron".

Por otro lado, Ruíz asegura que el vehículo "no está averiado". "Como la joven señala, el vehículo no estaba averiado, la rampa funcionó en otras paradas en las que la acera si estaba disponible, algo necesario para que pueda utilizarse. Había, como bien señala Alejandra un gran boquete, con ese boquete es imposible que la pasarela salga", señala y añade que lo llevaron "a revisión por procedimiento, pero no estaba roto ya que siguió funcionando todo el día".