La bahía de Pensacola, en el estado de Florida (EEUU), fue ayer escenario del homenaje a Bernardo de Gálvez y a los soldados españoles y británicos que perecieron en la conocida batalla acaecida en sus aguas en 1781 y que dio origen a la liberación de la ciudad, dominada entonces por los ingleses. Al emotivo acto, celebrado a bordo de la embarcación ´Nyhaven´, asistieron el diputado de Cultura, Víctor González; los alcaldes de Macharaviaya e Iznate, Antonio Campos y Gregorio Campos; el cónsul de España en Miami, Cándido Creis, y la vicecónsul honoraria de España, María Davis, entre otros.

Justo a la entrada a la bahía por la que atravesó en solitario el militar y gobernante malagueño a bordo del bergantín Galveztown, desafiando a las tropas británicas, se arrojaron al mar dos coronas de flores con los colores de la bandera de España, que previamente fueron bendecidas por un sacerdote de Pensacola que pronunció un responso por los caídos. El número de bajas fue de 95 muertos y 202 heridos.