La concesión del Balneario de los Baños del Carmen está pendiente de una decisión de la Junta de Andalucía. A finales de junio acaba el actual contrato y los gestores del restaurante tienen solicitada una prórroga de quince años, lo que daría estabilidad a la actual actividad económica e iría unida a la rehabilitación del edificio, proyecto realizado por el arquitecto malagueño Manuel Navarro y que sigue una línea conservacionista con el inmueble.

Damián Caneda, uno de los socios de la empresa que gestiona el Balneario, señaló que la solicitud está presentada ante la Consejería de Medio Ambiente y a la espera de respuesta, que entiende que no se alargará mucho sobre la fecha de término de la actual concesión, que es finales de junio. En este sentido, Caneda insiste en que han cumplido con los requisitos solicitados por la Consejería, incluyendo la presentación de un proyecto de restauración del Balneario, con idea de lograr así una prórroga de 15 años, que se sumarían a los casi cuatro años en los que ha estado al frente de la gestión de este espacio a través de la sociedad Parque Balneario Nuestra Señora del Carmen, tras la compra de los derechos a la anterior concesionaria.

La propuesta de actuación que acompaña la solicitud de ampliación de la concesión se centra en la recuperación del inmueble del Balneario y la terraza anexa, siempre con el criterio de alterar lo menos posible el estado del inmueble.

El arquitecto Manuel Navarro señala que la propuesta que han presentado «pondrá en valor todos los aspectos intrínsecos del inmueble, desde el magnífico salón de baile, las terrazas apergoladas, la terraza mirador en la cubierta, así como los almacenes que forman parte de este conjunto simulando los balnearios del norte de España».

Así, la propuesta, que no ha querido difundirse en detalles hasta que haya una respuesta positiva de la Consejería de Medio Ambiente a la prórroga, se ciñe a lo exigido por la administración andaluza, que planteaba que se respetaran «los aspectos históricos y etnológicos», aunque modernizando algunos elementos para devolver la identidad: «Respetando la línea arquitectónica propia de este sitio, pero trasladándolo a la actualidad».

La prórroga daría algo de estabilidad a la actividad económica que se desarrolla en el Balneario y que ha estado sujeta a la amenaza que representaba el final de la concesión a mediados de 2018. Hay que recordar que la sociedad Parque Balneario Nuestra Señora del Carmen, de la que Caneda es consejero, abonó un millón de euros a Vera y Acha por las acciones de la concesionaria del Balneario. De hecho, los actuales concesionarios abrieron un conflicto judicial en 2015 con la Junta de Andalucía, al considerar que la venta de acciones no era válida por un problema formal.