Un día después de la primera sesión de la comisión de investigación que trata de esclarecer por qué caducaron miles de expedientes de infracciones urbanísticas entre 2006 y 2016 en la Gerencia Municipal de Urbanismo, el alcalde, Francisco de la Torre, aseguró que habría menos carpetillas si todos los ciudadanos cumplieran las ordenanzas, aunque no concretó, como suplicaron los tres inspectores de obra, de qué medios dotará a su servicio. Eso sí, intentará que los tengan.

El panorama descrito por los tres inspectores fue de una falta absoluta de medios, tanto en número de inspectores (se ha pasado de ocho a tres en sólo unos años), como de medios: de hecho, algunos trabajan con aplicaciones informáticas elaboradas con el programa «Visual Basic», explicó uno de ellos, y hasta hace pocos no tenían ni monitor para poder comparar las fotos que hacían de las obras. Dijeron sentirse frustrados, aunque rechazaron injerencias o presiones políticas o una disminución premeditada de su departamento para dejar caducar los expedientes.

El regidor recordó ayer que los tres hicieron en 2017 más de 700 informes, «lo cual demuestra que hay una capacidad importante», pero añadió: «Lo que es bueno es que todos cumplamos las ordenanzas, mientras haya más cumplimiento por parte de todos menos expedientes habrá, eso es evidente».

Los periodistas le preguntaron insistentemente por qué medios serán esos (los inspectores ironizaron sobre que haría falta un departamento nuevo entero), a lo que De la Torre respondió: «Trataremos, dentro de que en la etapa de ajuste ha sido más difícil, suplir cuando alguien se jubila». A la pregunta de otro reportero, sobre si apoyará el servicio, dijo: «Trataremos, dentro de que necesitamos medios en todos los ámbitos».

«Nos ahorrábamos malos ratos»

«No estuve en la comisión, pero lo que sí había quedado muy claro es que no había ninguna intención de politizar la acción, se regía todo por criterios puramente técnicos, lo que hago es un llamamiento a que todos cumplamos la ordenanza. Tan simple como eso, todo el mundo sabe que no puede hacer obras ilegales, con eso nos ahorrábamos malos ratos todos».

El concejal de Ordenación del Territorio, Francisco Pomares, sigue insistiendo en que la falta de medios, agravada con la crisis, ha sido la causante de que numerosos expedientes caducaran.