De todos es bien sabido que en España existe un gran problema con el abandono animal, sobre todo en la época de verano, cuando algunos deciden dejarlos por el camino. La situación parece que no progresa muy favorablemente para «los mejores amigos del hombre». Según datos de la Fundación Affinity, en España se abandonaron más de 138.000 perros y gatos durante todo el 2017, cifra que supera en casi 1.000 a la de 2016 y 2015. De todos los animales abandonados, solo el 18% pudo ser devuelto a su familia de origen. Del resto, el 40% consigue una segunda oportunidad gracias a una adopción.

En Málaga, los perros y gatos abandonados logran una nueva vida gracias al trabajo de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Málaga. Esta protectora lleva casi 200 años luchando por dar una segunda oportunidad a los animales más desfavorecidos de Málaga. Carmen Manzano, su actual presidenta, lleva formando parte de la protectora desde el año 89 cuando conoció a la misma en una recogida de alimentos en un centro comercial. Sucedió en el cargo a José Carlos Cabra, formando parte de su equipo. Como cuenta Carmen Manzano a este periódico, en la protectora tienen todo tipo de animales: perros, gatos, conejos, tortugas, hurones, palomas y hasta gaviotas. A estas dos últimas las cuidan hasta que pueden volver a liberarlas, una vez identificadas y anilladas, en la playa de las Gaviotas de Vélez.

Durante el pasado 2017, en el refugio de Málaga se recogieron más de 2.000 animales; de los cuales más de 1.800 fueron adoptados. De esas adopciones, la presidenta destaca que en Málaga se producen muchas adopciones extranjeras, es decir, animales que van destinados a una familia de un país de fuera de España. Aunque también aclara que «cada vez lo ponen más difícil» porque, excepto Países Bajos, los demás países están empezando a pedir el ´pasaporte´ para el animal. En cuanto a la recogida, Manzano destacó que la gran mayoría son recogidos por el mismo refugio a través de avisos, sobre todo cuando se trata de una hembra embarazada. Pero también hay algunos casos en los que los mismo dueños llevan a los animales de los cuales ya no se pueden hacer cargo.

Pero todo este trabajo no sería posible sin el esfuerzo y la labor de todos los trabajadores y voluntarios que dan todo su apoyo al refugio. Actualmente, en la Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Málaga, trabajan nueve personas, dos veterinarios y un jefe de veterinarios, además de dos clínicas 24 horas que están asociadas al refugio, para ayudar en caso de emergencia en horas más difíciles para los veterinarios.

Carmen Manzano explica que las mayores necesidades que tiene son económicas y que por lo tanto la financiación es muy importante para el refugio. Dar de comer, cuidados médicos, desparasitar a 900 animales no es barato y son partes de los gastos a los que el refugio tiene que hacer frente. Sus recaudaciones recaen en una ayuda de 60.000 euros otorgada por el Ayuntamiento de Málaga, la cuota mínima de siete euros pagada por los socios y las donaciones, ya sean en dinero, comida o cualquier cosa que puede ayudar.

El proceso para adoptar es sencillo pero riguroso, no por el simple hecho de acudir al refugio se tenga garantizada la adopción. Para poder optar a completar una acogida de un animal es necesario cumplir una serie de requisitos y de pasos impuestos por el refugio.

En primer lugar, los responsables del refugio realizarán una entrevista a los interesados para concretar si son aptos o no para la adopción o especificar que animal es más compatible con ellos, ya que cada uno necesita unos cuidados o unas circunstancias específicas que si no se cumplen no se podrá adoptar.

Una vez se ha comprobado que los interesados son aptos para poder adoptar y han elegido a perro o gato afortunado que podrá disfrutar de una nueva familia se procederá a la entrega del mismo vacunado, desparasitado y con el chip y con los papeles debidamente arreglados.

Además, los machos ya estarán capados; en el caso de las hembras pueden no estarlo por lo que se les dará cita para proceder a su castración. Por último, y antes de poder llevarse al animal al que será su nuevo hogar, se deberá de abonar la cantidad simbólica de 100 euros en concepto de cubrir los gastos de vacunas, chip, desparasitación y demás tratamientos obligatorios que debe de seguir el perro o gato.

Pero aquí no acaba el proceso de adopción. Durante los dos años siguientes, se realizará un seguimiento para comprobar que el perro o gato se ha adaptado correctamente al hogar y se encuentra en buenas condiciones. Para este seguimiento, se realizarán llamadas telefónicas y, una o dos veces al año, personal del refugio acudirá al hogar donde vive para comprobar que el animal está cómodo y todas las condiciones que se pactaron a la hora de la firma de la adopción se están cumpliendo.

En caso de que se noten irregularidades en la zona donde vive el animal, la adopción podría ser cancelada. Carmen Manzano destaca que para todos los trabajadores y colaboradores del refugio «dar en adopción un perro o un gato es como dar en adopción a un hijo».

Silvia Barquero, presidenta del Partido Animalista Contra el Maltrato Animal, (PACMA) y que se encontraba de visita en el refugio cuando La Opinión realizó este reportaje, resalta que «Málaga es un ejemplo de altruismo, voluntarismo y trabajo profesional, está al nivel de las mejores ciudades como Madrid y Barcelona». Además también asegura que la ciudad de Málaga es «un ejemplo a seguir para las demás».

También quiso hacer referencia al cambio que se está produciendo en la sociedad, a la que la presidenta ve cada vez «más sensibilizada contra el maltrato animal».

Tanto Carmen Manzano como Silvia Barquero hacen un llamamientos a los poderes políticos para « dedicar más esfuerzos para las adopciones y evitar el maltrato animal». Al igual que piden más esfuerzo piden de igual manera implicación en conseguir implantar la Ley de Sacrificio Cero, Ley de Esterilización, Ley de Tenencia Irresponsable y también conseguir acabar con la venta de animales. Por último, ambas destacan que la gente está cada vez ofreciendo más apoyo y que le ven un gran futuro a la causa.