La historia se repite tres años después en el CEI Altabaca de Nueva Málaga. Un centro de Infantil en el que la Junta de Andalucía ha eliminado un aula de tres años, como ya informó La Opinión de Málaga. En esta ocasión, la decisión fue comunicada a las familias el pasado viernes, es decir, a solo dos días del inicio del curso escolar, dejando a los padres sin capacidad de reacción, a sus hijos reagrupados en las dos clases restantes y a cuatro alumnos, sin colegio. Se quejan de la improvisación de Educación y de su falta de planificación, y esta vez también, de que ha actuado "con mala fe".

En mayo de 2015, la asociación de padres ya se encargó de llevar a cabo movilizaciones para impedir la supresión de una unidad, en aquella ocasión de 4 años. Macarena Sánchez, presidenta del AMPA, defiende ahora los mismos argumentos de las familias de entonces: no quieren aulas masificadas donde estén escolarizados unos niños que aún son muy pequeños y que necesitan una atención constante por parte de su maestra, que además no cuenta con ningún tipo de monitor de apoyo. El caso de los niños que se han quedado fuera del centro es también dramático, ya que en algún caso, como explica Sánchez, "ya estaba matriculado, tenía comprado el material, conocía a su profesora y sus padres tenían toda la ilusión por que empezara su etapa escolar en este centro".

"Es un colegio de toda la vida en el barrio y lo que quieren es reducir su oferta. Este año empiezan por este aula, el año que viene quitarán otra y, al siguiente, otra", se lamenta Sánchez, que durante la mañana de este martes se ha manifestado junto a otra decena de padres a las puertas de la Delegación Territorial de Educación, en el Edificio de Usos Múltiples. Las familias han recibido el apoyo de Partido Popular, en las personas de Patricia Navarro, Ruth Sarabia y Elisa Pérez de Siles.

La secretaria general de los populares malagueños, por su parte, aprovechó para atizar a la Junta, a la que acusó de "falta de planificación" en materia educativa, "y exceso de improvisación a la hora de enfocar el nuevo curso". "Hace tan solo dos días se han enterado de que una de las líneas desaparecía de su centro escolar. Se han encontrado con esa eliminación taxativa y la reubicación en las otras dos en el mejor de los casos", insistió Navarro, que considera que "con este hecho se ha traspasado una línea roja, porque nunca hemos visto un acto de tanta injustica", añadió.

Según Navarro, la atención educativa que van a recibir estos niños tendrá deficiencias y disfunciones y que esta situación contradice el discurso de la Junta de que este año hay menos niños y más profesores, "cuando lo que han hecho es eliminar servicios educativos". "La Consejería tiene la oportunidad perfecta de dotar de mayor calidad al sistema educativo", agregó.

"Lo que pedimos es que reabran el aula que han cerrado sin previo aviso", insistió la presidenta del AMPA, que añade que en cada una de ellas había unos 18 niños, "un número perfecto y razonable". "Nos vemos ahora con dos clases masificadas de niños pequeños cuando todo estaba planificado y organizado y cuando en junio se habían ofertado y se habían cubierto los puestos escolares sin problemas". Las familias ni entienden ni comparten esta decisión, sobre todo cuando insisten en que hay demanda de plazas en la zona. Por este motivo, los padres han presentado firmas en la Delegación y han solicitado una entrevista con la delegada, Patricia Alba.

Por otra parte, Patricia Navarro también hizo mención a los problemas que viven las familias de los institutos de Torre de Benagalbón y el nuevo de Teatinos, "que tienen ahora mismo una obra por centro educativo". "Iban a ser escolarizados en aulas prefabricadas, pero todavía, a menos de una semana de empezar el curso en Secundaria, ni se han instalado", recordó. También se refirió al colegio de Estación de Cártama, un municipio donde Educación se ha visto en la obligación igualmente de escolarizar a alumnos en barracones, "pero están en sus casas porque, aunque ha empezado el curso, no están disponibles todavía", concluyó la representante del PP. Del mismo modo, criticó que con este tipo de comportamientos, la Junta haga distinciones entre alumnos, que estudian en aulas normalizadas y en aulas prefabricadas.

La Junta dice que no se supera la ratio legal

Por su parte, la Delegación Territorial de Educación informó a través de un comunicado de que una vez finalizado el plazo de matrícula para segundo ciclo de Infantil, "se autorizaron en la Escuela infantil Altabaca el número de unidades que determinaba las matrículas realizadas y dado que este número era insuficiente para la autorización de tres líneas, se autorizaron en el mes de junio dos, puesto que el número de alumnos por grupo no superaba la ratio establecida en dicho nivel educativo", negando así que esta decisión la haya tomado en septiembre, aunque los padres critican que le fue trasladada el viernes 7.

"Aun habiéndose producido matriculaciones fuera del periodo establecido en la normativa, en un nivel educativo no obligatorio, no se supera la ratio legal y, en todo caso, existen plazas disponibles en otros centros de la zona.

No obstante, la Escuela Infantil dispone de recursos humanos para en ejercicio de su autonomía, establecer la organización que estime necesaria, puesto que para la atención de ocho grupos de alumnado cuenta con once maestros, y así optimizar la atención al alumnado", señaló igualmente la autoridad educativa.