Un camión de Limasa cuando estaba trabajando en Echevarría de Huelin. Al parecer, al ser una máquina muy obsoleta y con un gran uso, tuvo un fallo mecánico que provocó que el motor empezara a arder. La conductora pudo salir del vehículo sin problema y un compañero de Limasa que estaba baldeando en las inmediaciones fue el encargado de apagar el fuego, conectando la manguera a una boca de riego, antes de que llegase el camión cuba. El incendio provocó una negra columna de humo que alarmó a los vecinos, aunque finalmente no tuvo consecuencias más allá del vehículo incendiado.