Visto que las administraciones locales, autonómicas y central, de momento, no saben cómo arreglar el fenómeno de las viviendas turísticas, que han provocado un alza en el precio de los alquileres además de expulsar a los vecinos de sus barrios en muchas ciudades, hasta 38 asociaciones vecinales de todo el país han decidido unirse para exigir al Ministerio de Fomento que regule de una vez este sector y lo haga lo antes posible.

Se trata de agrupaciones vecinales de Andalucía, Baleares, Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid, Navarra y el País Vasco y la idea es defender conjuntamente sus derechos «en unos momentos en los que la turistificación y la vertiginosa y descontrolada expansión de las viviendas de uso turístico están degradando la calidad de vida de las ciudades y expulsando al vecindario de sus barrios», dicen en un comunicado. Entre las malagueñas, se han agrupado la Asociación de Vecinos del Bulto, la Plataforma Derecho a Dormir, la Asociación de Vecinos Málaga Centro-Sur, Soho Barrio de las Artes y la Asociación Centro Antiguo, además de la marbellí del Casco Antiguo.

La primera acción de la Coordinadora de Asociaciones de Vecinos de Barrios Turísticos ha sido solicitar a los ministerios de Fomento e Industria «tener voz y voto en la regulación» de los pisos vacacionales. «Alarmada por las noticias de reuniones sectoriales entre el Gobierno y la empresa Airbnb, la coordinadora registró el lunes pasado cartas al ministro de Fomento, José Luis Ábalos, y a Isabel Oliver, secretaria de Estado de Turismo, en las que se solicitaba tener reuniones para dar a conocer nuestras peticiones y estar presentes en las reuniones que tengan como finalidad el estudio de la situación legal futura de estos negocios», aseguran.

Oliver fue interpelada por varias asociaciones en las redes sociales, y confirmó en Twitter que atendería esta reclamación. «Por supuesto que tenemos interés en los vecinos y se les convocará al grupo de trabajo sobre alquiler turístico que se iniciará en breve. La reunión con Airbnb fue un encuentro solicitado por sus responsables como otros muchos que estoy manteniendo con representantes del sector», escribió el 8 de septiembre. Las asociaciones se felicitan por el hecho de que se le meta mano al asunto, pero critican que no se haya contado con ellas hasta ahora.