Ciudadanos, el socio del gobierno del PP en el Ayuntamiento de Málaga, ha decidido soltar amarras con los populares y anunciaba ayer que votará en contra de las ordenanzas fiscales para el año próximo si el PP no acepta algunas de las enmiendas que piensa presentar al anteproyecto del área de Hacienda, en especial la que exige la eliminación casi total de la plusvalía en los casos de herencia (plusvalía mortis causa), según anunció ayer el portavoz de la formación naranja, Juan Cassá, que asegura que "votaremos que no a la aprobación de las ordenanzas fiscales en el caso de que nuestra enmienda sobre las plusvalía no sea aceptada".

La cuestión no es baladí, pues el apoyo de Ciudadanos es imprescindible para que las ordenanzas fiscales salgan adelante, toda vez que la oposición de izquierdas no las respaldará. La influencia es además directa sobre los Presupuestos, ya que estos se confeccionan en función del nivel de recaudación previsto en dichas ordenanzas. Por eso, horas después, el alcalde, Francisco de la Torre, mostraba su preocupación esperando que la nueva posición de Ciudadanos "no sea el anuncio de una postura de frenar los presupuestos y sea constructiva en esta materia".

Con todo, el posible voto en contra de Ciudadanos a las ordenanzas fiscales escenificaría una quiebra política importante en el pacto de gobierno suscrito por el PP y Ciudadanos, y de hecho dejaría muy tocado dicho pacto que hasta la fecha había funcionado sin problemas más allá de algunos roces.

Sin diálogo

Desde el inicio del verano se han venido sucediendo las muestras de desencuentro entre PP y Ciudadanos, como el anuncio del alcalde por sorpresa y sin comunicarlo antes a Juan Cassá de la municipalización de Limasa; la rectificación, también del alcalde, sobre el futuro de la Casa Invisible y más recientemente la decisión de Cs de llevar a la Fiscalía las denuncias contra concejales del PP por las supuestas infracciones en Urbanismo.

El anuncio de ayer de la posibilidad de votar en contra de las ordenanzas fiscales tiene su origen en el malestar de Ciudadanos con el PP, que ha presentado el proyecto de ordenanzas fiscales sin contar en absoluto con ellos, según denuncian, como ha venido ocurriendo en los años anteriores. "Nos hemos enterado por los medios de comunicación de la presentación de las ordenanzas. El PP no ha querido negociar con nosotros pues sabía de nuestra exigencia de hacer desaparecer la plusvalía por herencia", dijo Juan Cassá.

Ciudadanos, ya lo venía anunciado, exige la eliminación casi absoluta de la plusvalía en caso de herencia, que consideran "injusta y confiscatoria" , pues creen que es "volver a pagar un tributo que ya han abonado antes los propietarios de la vivienda a heredar".

Lo que Ciudadanos exige es que las ayudas o bonificaciones para el pago de este impuesto lleguen al 95%, que es el máximo que permite actualmente la ley, con lo que el contribuyente solo abonaría un 5 por ciento. Juan Cassá le ha pedido al alcalde que mire lo que han hecho otros regidores del PP, como el de Rincón de la Victoria, donde se ha aprobado la eliminación de la plusvalía mortis causa.

De la Torre se justifica

El alcalde, más allá de mostrar su preocupación por el necesario apoyo de Ciudadanos a los presupuestos de 2019, dijo también lamentar «si no ha habido ese diálogo previo antes de este tema, a lo mejor ha habido dificultad de conexión personal por no haberse podido encontrar», pero justificó esta ausencia de diálogo en que el edil de Economía y Hacienda, Carlos Conde, «no tenía conciencia de que, por parte de Cs, hubiera un planteamiento diferente, y entendía que lo que se había hablado en las ordenanzas del año pasado encajaba ahora", ya que, en esta ocasión, "íbamos más lejos de lo que ya quedó satisfecho Cs el año pasado". En cualquier caso, añadió que ni él ni el edil de Hacienda tenían conocimiento de que Ciudadanos quisiese ir más lejos en el tema de la plusvalía. Confía, no obstante, en que esta posición de Cs "no sea el anuncio de una postura de frenar los presupuestos y sea constructiva en esta materia".

También el PSOE terció ayer en la discusión con oportunismo para mostrar su "satisfacción por que otros grupos políticos" se sumen a la propuesta enarbolada por el PSOE "para transformar Málaga en una 'Ciudad Libre de Plusvalías'", en palabras de su portavoz, Daniel Pérez.