Escapar del paro sigue siendo la principal motivación de los emprendedores malagueños a la hora de montar una empresa, según los datos del Termómetro del Emprendimiento presentado este jueves por el Instituto Municipal para el Fomento del Empleo (IMFE) y la Asociación de Jóvenes Empresarios de Málaga (AJE), y con datos correspondientes al primer semestre de 2018. El estudio refleja que el 60% de las personas que acudieron a asesorase a estos organismos con idea de montar un negocio procedían del desempleo, frente a un 15% de trabajadores, otro 15% de estudiantes y otro 10% que ya eran empresarios.

El estudio, elaborado a partir de una muestra de las consultas, señala que el perfil del emprendedor en Málaga es mayoritariamente femenino (acaparan un 56% de las consultas), con una media de edad de 36-38 años y con una formación universtaria como nivel predominante. La edad de los emprendedores ha subido así en diez años respecto a los 27 que se computaban en 2010, según reveló ya el Termómetro en anteiores ediciones.

De esta forma, la motivación principal del emprendedor sigue siendo "crear su propio puesto de trabajo" (concentra el 52% de los proyectos en el caso de las mujeres el 60% en los hombres), por delante de otras razones como desarrollar una profesión acorde a los estudios cursados (en torno al 20%) la existencia de una oportunidad de negocio o el deseo de ser su propio jefe.

La concejala de Promoción Empresarial y Fomento del Empleo, Elisa Pérez de Siles, y el presidente de AJE Málaga, Ricardo Nandwani, han comentado que, en un contexto con aún altos niveles de paro, los "emprendedores por necesidad" continúan superando así de manera clara a los "emprendedores por vocación". Nandwani ha afirmado que las motivaciones de emprender en ambos casos son "igual de honorables" aunque ha mostrado también su deseo de que el porcentaje de vocaciones emprendedoras fuese mayor y calara más en la juventud. "Hay que seguir trabajando por fomentar esa cultura desde jóvenes. La edad de los emprendedores es muy alta", ha apuntado.

El responsable de la AJE ha precisado que hay emprendedores muy jóvenes muy bien formados a los que le falta experiencia en el mundo de la empresa y otros más mayores a que quizá adolecen de una mayor formación para poner los cimientos de una empresa. "Lo ideal sería que los jóvenes salieran de la Universidad con idea de montar un negocio pero antes pasaran por alguna empresa para saber cómo funciona. En el punto medio está la virtud", ha apuntado Nandwani, que cree que así también bajarían los índices de mortalidad empresaral entre quienes emprenden.

A diferencia de anteriores ediciones, el Termómetro del Emprendimiento del primer semestre de 2018 ha registrado "No sé por dónde empezar" como respuesta más señalada por la muestra como principal obstáculo para desarrollar su negocio. Un resultado que conecta con el hecho de que la mayor parte de las consultas están concentrada en proyectos que se encuentran en la primera fase de elaboración ("Toma de decisiones")."No sé por dónde empezar" fue señalada por el 67,6% de las mujeres y el 45% de los hombres. Los problemas para acceder a financiación, que otras veces eran los más citados, han quedado relegados a la segunda preocupación por parte de ambos sexos. En concreto, por el 37,5% de los hombres y el 21,9% de las mujeres. A estos obstáculos, le siguen el de "Demasiados trámites".

"El asesoramiento se ha convertido en el factor más importante, porque la mayoría de los emprendedores nos vienen todavía en la fase de decisiones. Tienen una idea de negocio pero no saben por dónde empezar. Tanto el IMFE como la AJE estamos asesorando en una fase previa", ha señalado Pérez de Siles.

En cuanto a los sectores más demandados por los emprendedores no hay demasiados cambios respeto a otros termómetros. De acuerdo con las estadísticas obtenidas, son hostelería y restauración (20%); publicidad, marketing y comunicación a la par que comercio, y salud y deporte, las más demandas por los hombres. Le siguen industria; servicios; transporte y automoción; consultoría y asesoría, turismo y construcción.

Las mujeres, por su parte, se decantan con mayor claridad por el sector comercio (22,9%); estética y belleza, servicios sanitarios; hostelería y restauración; salud y deportes y artes y cultura entre otras. Como novedad, destaca el ascenso del sector de la estética y la belleza y el de servicios sanitarios.

Este análisis recoge las consultas realizadas en las oficinas de IMFE y AJE Málaga en el primer semestre del año y en base a una muestra, en este caso de 370 consultas, obtiene la radiografía y necesidades de la población emprendedora en la ciudad.