­ En los próximos quince años, Málaga seguirá ganando población, liderando el crecimiento de Andalucía, pero ese alza no vendrá acompañada de una mejora de la natalidad. Así al menos lo ponen de manifiesto los datos de proyección de población publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que prevé un aumento del 15% en los residentes de la provincia, hasta alcanzar los 1,9 millones de habitantes.

Según la proyección demográfica, de aquí a 2033 el numero de nacimientos se mantendrá prácticamente estable en Málaga, con una ligera mejora en comparación con los datos de este año. Así, si para este 2018 se esperan 14.160 natalicios, para dentro de tres lustros la cifra sería de 14.726. Es más, de 2020 a 2026 se espera incluso un descenso de los recién nacidos, por debajo de los 14.000 anuales, para comenzar a remontar a partir de ese año. Esa ´estabilización´ de los nacimientos provocará en la provincia, si se cumplen estas previsiones, que el peso de los más pequeños se reduzca en el cómputo poblacional malagueño. Si actualmente los residentes menores de 16 años suponen un 18% de los habitantes de la provincia, en quince años este porcentaje se reducirá a un 14%. En cuanto a la edad de la maternidad, ésta se mantendrá más fuerte entre los 30 y los 40 años.

Frente a este descenso se situará el notable aumento del envejecimiento de la población, ya que los mayores de 65 años serían en 2033 prácticamente una cuarta parte de los residentes malagueños -un 24% frente al 17% actual, según el INE-. Ello significaría, además, que los habitantes que superarán la edad de jubilación serán casi el doble de aquellos en edad escolar.

Del mismo modo que no habrá cifras más altas de nacimientos, sí las habrá en el número de defunciones, que para 2033 se situarán en torno a las 16.000 anuales, lo que conllevará que el saldo vegetativo de la provincia acabe en negativo. Sin embargo, como ocurrirá a nivel nacional, Málaga seguirá creciendo en número de habitantes porque habrá más población inmigrante que llegue a la provincia que habitantes que se decidan a salir de ésta. Así, para dentro de quince años las emigraciones con destino al extranjero serán de entorno a 14.000, mientras que la llegada de ciudadanos de otros países se moverá en torno a las 24.000 anuales. Igualmente, será mayor el número de residentes que llegarán de otras provincias españolas que la cifra de habitantes que saldrán de Málaga con destino en España.

Locomotora andaluza

Que Málaga siga atrayendo a nueva población hará, además, que sea la locomotora poblacional de la comunidad andaluza, donde tres provincias perderán población: Cádiz, Córdoba y Jaén. El resto, como Málaga, ganarán residentes, pero en una medida muy menor comparada con Málaga, que en este tiempo pasará de 1,65 millones de habitantes a 1.901.694, siendo junto a Sevilla la única que supere los 1,9 millones. La provincia sevillana apenas ganará cuatro mil habitantes.

España contará en 2033 con 49 millones de habitantes

En el año 2033 España contará con 49 millones de habitantes, de los que uno de cada cuatro -el 25,2% del total- tendrá 65 o más años, según las proyecciones de población, que reflejan que ese aumento poblacional está motivado principalmente por el elevado saldo migratorio, positivo en todo el periodo proyectado hasta 2033.

De acuerdo a este estudio, en los 15 próximos años España ganará 2.375.776 habitantes (un 5,1%), siempre y cuando se mantengan las tendencias demográficas actuales. Se prevé un progresivo e ininterrumpido aumento de las defunciones, superior al número de nacimientos, lo que daría lugar a un saldo vegetativo negativo durante todo el periodo proyectado.

No obstante, este saldo vegetativo negativo se vería compensado con el saldo migratorio en los primeros 15 años de la proyección, lo que provocaría un aumento de población.

En concreto, según el INE y recoge Europa Press, España ganará unos 1,3 habitantes hasta 2022 en sus intercambios de población con el extranjero. Esta tendencia continuaría en años sucesivos, obteniéndose así una ganancia neta de población debida a migraciones de casi 3,4 millones de personas hasta 2033.

Los nacimientos seguirán descendiendo hasta el año 2022, continuando así la tendencia iniciada en 2009. Así pues, entre 2018 y 2033 nacerán 5,7 millones de niños, un 15,8% menos que en los 15 años anteriores, según recalca el Instituto Nacional de Estadística, que prevé que a partir de 2023 empezarán a aumentar debido a la llegada a las edades de mayor fecundidad de generaciones cada vez más numerosas, como las nacidas a partir de la segunda mitad de los años 90.