La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha pedido varias veces al Gobierno central que reforme ya el impuesto de plusvalía después de que el Tribunal Constitucional en una sentencia considerase que no se puede cobrar por los ayuntamientos cuando el inmueble se vende por un valor inferior al que costó. Ello supondrá que los consistorios dejen de percibir un dinero importante y, mientras tanto, en Málaga se están liquidando las plusvalías con ventas a pérdida pero no se están cobrando a la espera de ver qué hace el Ejecutivo central. El teniente de alcalde de Economía y Hacienda y portavoz del equipo de gobierno, Carlos Conde, insiste en que antes de eliminar o reformar el impuesto en los supuestos de herencia ,como han pedido el PSOE y Ciudadanos, habría que esperar a ver qué dice el Gobierno.

De hecho, la FEMP ha señalado que en el acuerdo de los Presupuestos Generales se prevé que sea el Estado quien compense a los gobiernos locales por devolución de las plusvalías. El presidente de la FEMP, el socialista Abel Caballero, dijo que «se devolverá a todo aquel que tenga derecho a ello, pero la devolución deberá ir a costa del Estado, sufragado por la Hacienda Estatal».

En Málaga, el PSOE ha pedido hasta la saciedad la supresión de la plusvalía «mortis causa», es decir, cuando la transmisión del inmueble se da en caso de herencia paternofilial, y Ciudadanos puso como condición aumentar las bonificaciones hasta el 95% de los casos para aprobar las ordenanzas fiscales de 2019, lo que obligó al equipo de gobierno a retirarlas con el fin de negociarlas con socialistas y liberales. Carlos Conde señaló que lo explicitado por la FEMP confirma «lo que el PP ha pedido en infinitas ocasiones a los concejales de la oposición en diferentes plenos y comisiones informativas; todos somos conscientes de que el Gobierno tiene en su haber el reformar el impuesto porque así lo ordena el Tribunal Constitucional. El borrador de los Presupuestos Generales del Estado entiende que el hecho de no percibir la plusvalía por las ventas a pérdida puede suponer una gran reducción de los ingresos del ayuntamientos. Cualquier eliminación o modificación del impuesto, como plantean los socialistas, sería imprudente».

En este sentido, el portavoz del equipo de gobierno abogó por «esperar a ver cómo nos afecta y se confirma todo ello, hablemos, porque el impacto en las cuentas públicas de la reforma de la plusvalía puede ser muy fuerte y nosotros estamos por tener prudencia y respetar los principios básicos de la economía, la estabilidad presupuestaria sobre todo. Lo prudente es esperar a ver cómo impacta la reforma y ver cómo se nos compensa a los ayuntamientos, como Aznar compensó a los consistorios al sacar del cobro por parte de las administraciones locales las actividades inferiores al millón de euros en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE)».

La FEMP, dijo, ya ha interesado que si se hace la reforma esta fuera compensada. «Es un mensaje al portavoz del PSOE, Daniel Pérez, que llame a Abel Caballero y le pregunte, que se deje asesorar por los alcaldes con experiencia en la gestión pública y mientras podemos hablar de progresividad fiscal».