Jarro de agua fría del secretario general del Ayuntamiento de Málaga a los planes del equipo de gobierno en relación a la declaración como Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) de 98 calles del Centro y cinco de El Romeral. El alto funcionario asegura que hay que adelantar el horario de retirada de las terrazas y veladores en temporada alta o viernes y sábados (previsto a las 2.00 horas), aunque no especifica cuánto tiempo, afirma que el periodo de vigencia no puede ser de un año, como prevé el concejal de Sostenibilidad Medioambiental, José del Río, sino de cinco, y aclara que el periodo de excepción del horario de cierre de terrazas y veladores no puede ser de 70 días al año, sino de 20.

La principal medida del ZAS es una moratoria a la apertura de bares, restaurantes y discotecas en las calles de aplicación, de forma que no se darán licencias para nuevos negocios. También se prevé un horario más restrictivo para la retirada de terrazas y veladores. Los hosteleros han puesto en marcha una campaña para oponerse a estas medidas para acabar con el ruido, y ya veían con malos ojos ambas disposiciones, entre otras más (como extremar los controles contra el ruido), por lo que ahora el informe del funcionario viene a restringir aún más las iniciativas previstas.

Así, el documento que irá hoy a pleno prevé la obligatoriedad de retirar las terrazas y veladores a las 1.00 horas de domingo a jueves y en otoño o invierno; los viernes y sábados y durante la primavera y el verano la hora de cierre son las dos. El secretario explica que el decreto 155/2018 de la Junta de Andalucía, en su artículo 22, establece que «en ningún caso el límite horario para la expedición de bebidas y comidas en dichos espacios podrá exceder de las 2.00 horas, debiendo quedar totalmente desalojados y recogidos, como máximo, en el plazo de media hora a partir de ese límite». Así, la declaración de ZAS debe tener «carácter restrictivo», con lo cual para que esos horarios de cierre tengan esa calificación «deberían anticiparse entre el domingo y el jueves en periodo de primavera verano y durante viernes y sábado en cualquier periodo del año». Es decir, que la hora límite para recogerlas en esos tramos temporales no puede ser las dos, sino antes. No dice cuándo debe fijarse el límite, pero sí que hay que rebajarlo. Eso sí, no afectará al horario de recogida previsto de domingo a jueves o para otoño e invierno (1.00 horas).

«Al tratarse de un contenido mínimo de los planes zonales específicos, proceder a la reducción del horario máximo de cierre establecido en el Decreto 155/2018, de 31 de julio para las terrazas y veladores anexos o accesorios a los establecimientos de hostelería, ocio y esparcimiento», pide el secretario.

Por otro lado, el documento prevé una prueba piloto de un año (fue aprobado por la Junta de Gobierno Local el 28 de septiembre y por la Comisión de Pleno de Sostenibilidad Medioambiental de octubre, además de ir hoy a pleno antes de salir a exposición pública para recibir alegaciones). El problema es que no respeta una norma superior. «La Ley 7/2007 de Gestión Integrada de la Calidad Ambiental establece que el contenido mínimo de los planes de acción en materia de contaminación acústica deberá precisar las actuaciones a realizar durante un periodo de cinco años», por lo que ese es el tiempo por el que deben declararse como ZAS las calles señaladas del Centro y El Romeral, no un solo ejercicio.

Asimismo, el documento contempla una excepción al régimen de cierre de las terrazas o veladores anexos a los negocios, habilitando a la Junta de Gobierno Local a no aplicarlo durante determinadas épocas del año con un máximo de 70 días cada ejercicio. Ese régimen, dice el secretario general, «excede del límite previsto en el artículo 23-2 del Decreto 155/2018», que establece que los ayuntamientos no podrán ampliar durante más de 20 días naturales al año los horarios de cierre de los establecimientos públicos previstos en el artículo 17.1 por motivo de la celebración de actividades festivas populares o tradicionales, por lo que el documento aprobado por el Consistorio malagueño debe adecuarse a esa veintena de jornadas.