La subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez, ha destacado el trabajo que se está haciendo por parte del Gobierno central para mejorar en la provincia la asistencia a las personas rescatadas en pateras a aguas de Andalucía y ha asegurado que Málaga "es un nodo más de una red de atención a la migración que llega por las costas andaluzas".

Así, Gámez ha indicado que la solución para una atención de migrantes en Málaga "va a depender no solo de que Málaga tenga recursos sino también de los recursos que tengan los demás", señalando que "todos los recursos que se han hecho hasta ahora, aunque no hayan sido en Málaga, nos sirven", como el Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) de San Roque (Cádiz).

En una entrevista con Europa Press, ha destacado "todo lo que se ha hecho en estos cuatro meses de gobierno socialista" que supone "una respuesta que el anterior Ejecutivo no había dado a pesar de que la inmigración ya estaba llegando". "No se puede hacer más en el tiempo que llevamos", ha asegurado.

No obstante, Gámez ha aseverado que "lo que hemos hecho en cuatro meses todavía no nos da plena satisfacción", ya que, ha dicho, "nos gustaría tener más para que la atención a los inmigrantes fuera mejor, con mejores recursos", pero ha incidido en que han contado "un tiempo de acción muy corto para un problema que viene siendo grande desde hace tiempo".

En cuanto a los proyectos en marcha en Málaga, ha explicado que "la primerísima" asistencia humanitaria y sanitaria cuando los migrantes llegan a puerto se realiza a través de Cruz Roja, ahora mismo en una carpa, pero "ya están casi terminados unos módulos, con financiación del Gobierno, que Cruz Roja dispondrá en la zona de pescadería del recinto portuario".

Asimismo, ha indicado que el CATE, que es donde se hace la identificación y filiación de los migrantes por parte de la Policía Nacional, también tiene ya su ubicación buscada, que es dentro de la instalación portuaria, a la altura de la desembocadura del río", una iniciativa que "conlleva unos trámites administrativos que ya se están siguiendo, desde el perímetro de seguridad a la autorización que tiene que dar el propio puerto".

Pero es que habrá que realizar la preparación del terreno "para poder hacer la obra", ha dicho, ya que, según ha apuntado, "hemos desechado el modelo de tiendas de campañas, que era más rápido pero no era eficiente porque necesitamos una estructura más fuerte".

"Como toda obra, lleva tiempo y por tanto no es una solución inmediata a corto plazo, sino a medio", ha manifestado la subdelegada, quien ha preferido no dar plazos "porque somos presos de las fechas y se trata de un terreno que hay que habilitar totalmente y correctamente para acoger estas instalaciones".

Ha insistido en que la solución a la llegada de migrantes "se tiene que prestar en todas las provincias en las que reciben inmigrantes, por eso hay que ver también lo que se hace en toda Andalucía", recordando que "ya nos estamos beneficiando del CATE de San Roque y están previstos otros en Almería y Granada, con lo que el primero que esté disponible con plazas suficiente nos va a aliviar a nosotros".

A corto plazo, ha explicado que la solución pasa "por un lugar para atenderlos mientras se construye el CATE" para lo que ha recordado que solicitaron al Ayuntamiento la cesión de casetas del recinto ferial, lo que "evitaría desplazamientos a San Roque y permitiría que estas personas pudieran estar en algún lugar mientras se producen los traslados".

Gámez ha agradecido la colaboración del Ayuntamiento, ya que el alcalde, Francisco de la Torre, firmó el pasado lunes el decreto para autorizar a la Subdelegación del Gobierno el uso provisional para CATE de dos casetas ubicadas en el Recinto Ferial, unas instalaciones de las que el Consistorio ostenta tanto la titularidad como la posesión y que cuentan con casi 500 metros cuadrados de superficie. Además, el Ayuntamiento ha actuado ya en las instalaciones, realizando mejoras.

Para la subdelegada es importante esa autorización municipal, ya que ha precisado que desde el 15 de septiembre, momento en que "se produce ese vacío" porque no se pueden utilizar los polideportivos municipales, "se han producido desajustes porque no teníamos casi recursos", utilizando las plazas de había en la Casa de Botes o en la comisaría.

Por otro lado, ha señalado que tras estar en el CATE, en el que los migrantes sólo pueden permanecer 72 horas, hay otra prestación que también se realiza por el Gobierno a través de Cruz Roja para que los inmigrantes puedan estar en algún lugar mientras que buscan a familiares y deciden si se van a otras provincias u otro países.

Ha dicho que Málaga no cuenta en este momento con unas instalaciones así. En su momento, por parte del equipo de gobierno de la capital se propuso el parque de bomberos de Campanillas para cederlo a Cruz Roja, pero esta iniciativa no fue aceptada. De este tipo de centro se ha hecho uno recientemente en la provincia de Cádiz y se está buscando un lugar en Málaga donde poder ubicarlo, ha explicado la subdelegada.

Gámez ha asegurado que la inmigración "también se trabaja con otros mecanismos que se está utilizando por parte del Gobierno, como son las negociaciones a nivel europeo y con los países de origen". "Tenemos que ser conscientes de que esto no es una realidad estática, sino que depende de todo ese trabajo que se está realizando y que bien por el flujo de entrada o la situación de solidaridad entre países esta realidad puede cambiar", ha concluido.