El pulso electoral que enfrenta al PP y a Ciudadanos traslada el cuadrilátero a Málaga. Y lo hace justo en un momento en el que la tensión entre ambos partidos se ha acrecentado, después de que la formación naranja decidiera levantar el bloqueo de la ley de estabilidad presupuestaria y, en consecuencia, permitir un futuro debate de presupuestos de Pedro Sánchez. Aunque eso no signifique que los vayan a apoyar. Hasta entonces, PP y Ciudadanos mantenían bloqueado el debate parlamentario a su antojo, utilizando la mayoría que tienen en la Mesa del Congreso. Mucho se ha especulado sobre las elecciones andaluzas como preludio a la pugna mayor entre Pablo Casado y Albert Rivera para ver quién se hace con la mayoría de votantes en el espectro del centroderecha. Y ambos están confirmando que esa sensación es tan real como la consideración que tienen de Málaga como provincia clave para el resultado del 2D, además de ser un circunscripción en la que ambos partidos creen tener a mucho votante potencial. Con menos de 24 horas de diferencia, Casado y Rivera encabezarán sendos actos en la capital, en los que se esperan mensajes directos que agrandan el frente y traten de seducir a indecisos.

Primero será Casado. El presidente nacional del PP estará hoy en Málaga para inaugurar la intermunicipal de su partido, que se celebrará a lo largo de dos días en el hotel NH, y que será clausurada por el candidato del PP a la presidencia de la Junta, Juanma Moreno. Por el camino intervendrán también el líder de los populares malagueños, Elías Bendodo, y el secretario general del partido, Teodoro García Egea. El apoyo a Moreno en esta precampaña está siendo muy intenso. El propio Casado ya lleva acumulados varios actos con su candidato en Andalucía. Las andaluzas son las primeras elecciones que pondrán a prueba su propio liderazgo dentro del partido.

Un mal resultado será interpretado también como un castigo hacia él. Quedar por detrás de Ciudadanos sería directamente una pesadilla, con consecuencias que podrían ser traumáticas para las aspiraciones del PP a nivel nacional. En los planes de Rivera está, aseguran fuentes consultadas, quedar un voto por encima de los populares. Esto le permitiría sacar a pasear un segundo trofeo autonómico, después de Cataluña. Aunque PP y Ciudadanos han ido de la mano después de la moción de censura, la precampaña andaluza está dejando claro que en realidad son enemigos íntimos por un mismo espacio electoral. Para muestra, las críticas de Bendodo a principios de semana, que provocaron indignación en los integrantes de la lista del partido naranja por Málaga. «Ciudadanos ha vuelto a demostrar que no es de fiar», argumentó el líder provincial del PP, además de dar por hecho que Rivera dará apoyo activo a los presupuestos que ha pactado Sánchez con Pablo Iglesias. «Escuchar a Elías Bendodo manifestar que Ciudadanos no es un partido de fiar, cuando es presidente de la Diputación gracias al acuerdo de investidura con Ciudadanos, es un ejemplo de inconsistencia política», contestó Teresa Pardo, que va de número cuatro en la lista que encabeza Javier Imbroda.

Una réplica que sintetiza el enorme malestar que se ha generado en Ciudadanos. Aseguran que el PP está mintiendo para crear una confusión deliberada. Por otra parte, resume muy bien el espagat en el que se encuentran ambas formaciones, conscientes de que el día después de las elecciones se necesitan mutuamente.

Algo, sin embargo, que no hará cambiar la actitud de Casado esta tarde. Seguirá insistiendo en que nada bueno puede salir de un voto a Ciudadanos y lo equiparará con dar carta blanca al PSOE. Así está ahora mismo la política en general y lo que va de precampaña en Andalucía está dejando claro que no hay mucho lugar para las propuestas y debates en profudidad. Será la tercera vez que Casado llegue a la provincia para un acto oficial desde que lidera al partido. Primero, estuvo en Álora para estrenar el curso político, el pasado 31 de agosto. El 12 de octubre, acompañó a

Moreno en Málaga, en un acto del PP-A con motivo del Día de la Hispanidad. Y la implicación de Casado en las andaluzas seguirá siendo intensa. Para prueba, su agenda de este fin de semana. Según fuentes del PP, se instalará en Vejer de la Frontera. Desde ahí, se desplazará el sábado a Rota para visitar la base militar. El domingo, acudirá a Sevilla, a un encuentro con NNGG.

Por su parte, Ciudadanos tiene un gran desembarco para mañana. El propio Rivera apoyará a Juan Marín en un acto que se celebrará en el Museo del Automóvil, y que ha sido acuñado como «presentación de campaña». En Ciudadanos son conscientes de la importancia que tiene su marca en Málaga. El propio Marín admite que muchos votos le llegan porque Rivera ejerce de acelerador abierto, aun a riesgo de debilitar su propio liderazgo. «No se puede gobernar España sin Andalucía», decía Rivera. Queda claro que sin Málaga, tampoco.