La calidad,la distinción en el sabor y el tratamiento del producto tiene su recompensa. Esta es la que han tenido tres empresas de Málaga, las cuales han logrado ser reconocidas por los paladares más exigentes. En total, ocho quesos malagueños han sido galardonados en los prestigiosos premios del sector quesero, World Cheese Awards.
La nueva edición de estos premios se celebraron el pasado 2 de noviembre en la ciudad noruega de Bergen y en ella, han participado 3.472 quesos de todos los rincones del mundo. El jurado, compuesto por 235 expertos de 29 países, fue el encargado de catar los diferentes productos participantes. Entre ellos, se encontraron varios quesos malagueños, pero fueron los pertenecientes a las empresas queseras Agamma, El Pinsapo y La Cañada del Capitán las que lograron traer a la provincia una medalla de oro, cinco de plata y dos de bronce. Todos estos los galardones englobados dentro de la categoría de Quesos de Cabra.
Queso emborrizado en aceite
La cooperativa malagueña, Montes de Málaga Agrupación de Ganaderos (Agamma), la cual agrupa más de 170 socios productores de leche de cabra de toda la provincia, sorprendieron al jurado con tres de sus elaboraciones, todas procedentes de ganado que pasta al aire libre en los Montes de Málaga. Su caracterización radica en la apreciación de hierbas silvestres del terreno.
El queso curado emborrizado logró la medalla de plata. Este producto se distingue de los demás, por su cobertura de aceite de oliva virgen extra y de salvado de trigo. "El uso de estos ingredientes le proporcionan la tradicional sensación de estar comiendo pan untado en aceite", asegura Enrique Cazorla, maestro quesero de Agamma. La característica sensación intensa se consigue gracias a un proceso de maduración de unos seis meses, mediante el cual recibe el mismo tratamiento que el curado a secas, pero al que se le incorpora una fase posterior de embadurnado en aceite y salvado.
La segunda medalla de plata la han obtenido gracias al queso curado Montes de Málaga. Este se distingue por sus aromas caprinos y un regusto picante logrado gracias a su largo proceso de maduración en seco que hace que su conservación sea óptima.
La de bronce se la ha llevado su queso fresco. Su carácter más importante es la calidad lograda con la inmediatez de su producción para aumentar el sabor lácteo del queso. "El intenso sabor y la textura, lo hemos logrado gracias a la tan fresca y de alta calidad que usamos en Agamma. El producto final es espectacular", destaca Cazorla.
Combinación de tomillo y leche de cabra
La Cañada del Capitán, fábrica artesanal localizada en Vélez-Málaga, ha sido la empresa malagueña que en esta edición se ha hecho con la medalla de oro, además de dos de plata. El galardón dorado se lo ha llevado su queso de cabra semicurado envuelto en tomillo y moldeado a mano, gracias a su tratamiento y los matices con esta hierba aromática. "A esta especia se le suma el proceso de maduración y la selectiva alimentación de las cabras, la cual se basa en brotes tiernos y demás plantas aromáticas, que hacen que el sabor se muy especial y de calidad", asegura Mélani Ruiz, representante de la empresa.
Su queso de cabra curado, se ha hecho con una de las dos medallas de plata con las que han sido premiados. Le caracteriza su aroma y las notas picantes que se intensifican en el paladar, logrado a través de un proceso de curación de unos tres meses. El segundo premio plateado se lo ha llevado el queso semicurado también elaborado con leche de cabras malagueñas, se caracteriza por un sabor más suave y una sensación más tierna, a lo que se le suma su alto contenido en vitamina B2.
Tacto mantecoso y cremoso
La quesería El Pinsapo, de la Sierra de las Nieves, la cual se manifiesta como "maestros artesanos del queso puro de cabra", ha conseguido formar parte de los mejores quesos del mundo gracias a los dos galardones de bronce y plata conseguidos en el certamen.
Por un lado, con su semicurado han alcanzado la distinción plateada. Su olor característico a roquefort y camembert, junto al tacto mantecoso y cremoso en el paladar hacen que se haya diferenciado claramente de otros quesos de su misma categoría. Por otro lado, el bronce ha sido del curado, característico por su color oscuro y sabor degradado picante y con retrogusto a frutos secos, conseguido en su proceso de maduración, que se extiende desde los seis hasta los siete meses.
Además, de los premiados malagueños y las distinciones de oro, plata y bronce, el certamen también posiciona en Top 16, los quesos que valoran como 'Súper Oro', entre ellos se ha situado tres quesos españoles: el Majonero Semicurado con pimentón de DOP Maxorata, el Queso Viejo Mezcla de La Reserva de Entrepinares y el Madurado de Cabra Ecológico de la quesería Mas el Garet.