La provincia de Málaga se resiste a la desaceleración que está viviendo tanto España como Europa y se posiciona como el motor económico de Andalucía. Así lo ha afirmado Fernando de Alcázar, director del Servicio de Estudios del Colegio de Economistas de Málaga, en la presentación del Barómetro Económico correspondiente al tercer trimestre.

Algunos de los datos que ratifican esta situación son el aumento de la inversión dentro de la provincia, situándose en el último trimestre en el 7,70 por ciento, un punto más que los meses anteriores o la cantidad de empresas creadas, la cual asciende a 5.365 suponiendo 33,8% del total andaluz y un 6% más en el tercer trimestre del año.

Los datos positivos que acompañan a Málaga, están haciendo que los cimientos conseguidos resistan y hagan de escudo frente a la situación económica que está viviendo la zona euro. A esto, ayuda la creación de empleo que está experimentando, donde a pesar de estar enclavada en una comunidad en la que los datos de paro son elevados, ostenta junto a Cádiz o Baleares, el récord de la creación de empleo desde la recuperación con un crecimiento de empleo acumulado del 30%. 'Hay que tener en cuenta un dato esencial que hemos hecho público en este barómetro, y es que desde 2014, el peor momento de la crisis, Málaga ha creado 146.000 ocupados, lo que significa el 35% de lo generado en Andalucía', ha destacado Del Alcázar.

Las perspectivas de comportamiento del pasado barómetro, en el que se afirmaba la posibilidad de alcanzar el tres por ciento del PIB, se han reducido manteniendo la previsión del cierre del ejercicio anual entorno al 2,7%, frente al 2,5% nacional. El hecho de que ese decrecimiento se esté consolidando, está afectando al desarrollo que experimentan las diferentes provincias, el cual se está ralentizando.

Otro de los datos que se resalta, es que a pesar de que la economía malagueña se nutre principalmente por el sector servicios-turismo, suponiendo un 84% del PIB provincial, en el último año, están teniendo un papel importante el sector agropecuario, el industrial tecnológico y repuntando de nuevo aunque lentamente, la construcción. En este entramado económico, se está produciendo una diversificación económica provincial, gracias a que la capital está compensando el peso que otras zonas han tenido en otros periodos sobre el desarrollo de la provincia.

Viviendas

El sector inmobiliario sigue recuperándose como consecuencia del aumento del ritmo de venta de viviendas, el cual se sitúa actualmente en un 8,8%, acumulando y en lo que va de año 32.183 de ventas. 'Este crecimiento se está viendo influido en parte, por la compra con fines inversores, ya que se está produciendo una rápida revalorización de los inmuebles', así lo ha asegurado Antonio Pedraza, decano del Colegio de Economistas, presente también en la presentación de este barómetro provincial.

Otras de las cifras que recuerdan a los momentos anteriores a la crisis inmobiliaria vivida, a pesar de que la construcción no termina de alcanzar el mismo ritmo de crecimiento, es la cantidad de viviendas aprobadas, la cual se sitúa en 6.484 anuales. Frente a estos datos positivos, está la reducción del ritmo de viviendas terminadas en la provincia, provocada por la falta de financiación y decisión a la hora de emprender los proyectos, derivados directamente de la inseguridad en el futuro político y económico de España.

Esta falta de construcción viene acompañada el aumento del precio de la vivienda, el cual ha subido un 6,4% en el último año, frente al crecimiento que experimenta Andalucía, un 2,3% de media.

Turismo

Respecto a la base de la economía provincial, el turismo interanual sigue aumentando tanto en Málaga como en el resto de Andalucía. En la provincia, a pesar del que las zonas costeras presentan un descenso en la temporada estival, al incremento ha sido del 2,58% frente al 1,78 del segundo trimestre. Ante este sector, se prevé que las cifras futuras estén más compensadas, así lo ha referido Juan Carlos Robles, decano del Colegio. 'El sector turístico está desarrollándose y ya no sólo se limita a sol y playa. Están pisando fuerte el turismo cultural, gastronómico, los turistas que se acercan por periodos como la Navidad y la Semana Santa, y ello, está haciendo que las cifras vayan igualándose, ofreciendo buenos datos a lo largo de todo el año', ha afirmado.

A pesar de este aumento, cabe destacar que el grado de ocupación hotelera ha disminuido respecto al año pasando, repercutido por la aparición de los alojamientos turísticos. Los datos pasan del 73,5 al actual, 70,6 por ciento. Pero, paralelamente, este tipo de estancias también ha experimentado un descenso, en el que los viajeros alojados en estos apartamentos ha disminuido un 5,26 por ciento.

Durante el mes de septiembre, también se ha estancado la llegada de turistas, pero ha aumentado el gasto de estos en un 2,5%, lo que se traduce en la llegada de turismo de mayor calidad.