Efectivos del Grupo de Protección de la Naturaleza (GRUPRONA) de la Policía Local de Málaga han sorprendido a dos hombres, naturales y vecinos de Málaga de 51 y 58 años de edad, realizando la captura ilegal de jilgueros y pardillos utilizando artes prohibidas.

Los hechos tuvieron lugar sobre las 10.30 horas de la mañana del sábado 10 de noviembre. Una llamada a la Sala 092 de la Policía Local de Málaga puso en alerta a los agentes, que se desplazaron hasta el lugar y localizaron a los autores en la zona denominada Loma de la Chica, en el interior del Parque de las Virreinas, para lo que contaron con la colaboración de varios senderistas que se encontraban por la zona.

Los policías locales los sorprendieron sentados en unas piedras, sujetando uno de ellos unas cuerdas con unas redes extendidas en el suelo a unos veinte metros de distancia, el cual, al percatarse de la presencia policial, indicó mediante gestos a su acompañante que liberase las capturas que tenían en una pequeña jaula, pudiendo observar los agentes como al menos un ave emprendía el vuelo.

Red abatible de tipo libro y siete aves reclamo

Inspeccionada la zona, los policías locales comprobaron que las cuerdas estaban dirigidas a ras de suelo a través de unas piquetas a un mecanismo de redes y varillas de madera, de forma que al tirar de ellas, las redes se abatían, capturando a las aves que se posaban en la zona, método conocido como red abatible o red de libro, utilizando como reclamo a siete pájaros, cinco de ellos metidos en jaulas de madera y alambre y dos más sujetos a unas varillas con unos cordeles de unos 20 centímetros de longitud, además de alpiste, insectos y recipientes con agua.

Inspeccionadas las aves utilizadas como reclamos, los policías locales comprobaron que tres eran camachos o pardillos y cuatro jilgueros, encontrándose tan solo uno de los camachos identificado con anilla, reconociendo los autores que las aves no anilladas habían sido capturadas recientemente y la anillada era de un amigo.

Dichas especies, si bien no se encuentran inscritas en el listado de especies silvestres en régimen de protección especial y, en su caso, del catálogo español de especies amenazadas, tampoco son especies cazables, gozando de la protección general que les otorga la ley de la flora y fauna silvestres y sus hábitats, que establece la prohibición de captura en vivo de cualquier ejemplar de los animales silvestres.

Del mismo modo, la ley del patrimonio natural y de la biodiversidad establece que la caza con redes para la captura o muerte de animales quedan prohibidos por ser medios masivos o no selectivos.

Ante los hechos, los agentes liberaron las especies capturadas, aún asilvestradas, decomisando el ejemplar anillado que fue trasladado al Centro Zoosanitario Municipal a disposición de su propietario. Así mismo, procedieron a la incautación de las artes y útiles empleados para la captura, decomisando un total de seis jaulas, las redes, varillas, cordaje y piquetas utilizadas, quedando todo ello depositado en dependencias del GRUPRONA.

En cuanto a los cazadores furtivos, preguntados por los agentes, manifestaron no estar inscritos en ninguna asociación silvestrista, careciendo de autorización administrativa para el ejercicio de la actividad. Al encontrarse ambos indocumentados, fueron trasladados a sus respectivos domicilios por otra dotación de la Policía Local de Málaga a efectos de identificación. En los días posteriores, serían nuevamente localizados e informados de sus derechos como investigados no detenidos por un presunto delito de los relativos a la protección de flora y la fauna.

En lo que respecta al ave anillada, los agentes contactaron días atrás con la Federación Andaluza de Caza al objeto de identificar al propietario, quedando a la espera de respuesta de este organismo. Asimismo, remitieron a la Delegación Territorial de Málaga de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía oficio informando de las infracciones administrativas cometidas por los investigados.

A uno de los implicados no le constaba antecedente alguno, si bien al otro le constan por sendos delitos de lesiones y quebrantamiento de condena.