La Comisión de Economía aprobó, por siete votos a favor y cuatro abstenciones, la propuesta de los límites de ejecución de gastos plurianuales de la actuación de la segunda fase de las obras de rehabilitación del antiguo Convento de San Andrés. El inicio de la actuación está prevista para este año en el presupuesto del Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) y este era un paso imprescindible para sacar a contratación el expediente con el fin de adjudicar los trabajos a una empresa.

Así, el Servicio de Gestión Económico Presupuestaria elevó a la Comisión de Economía la propuesta de distribución de anualidades para la obra, que crecen de forma notable en relación a lo que se había previsto. En una nota de prensa de finales de junio, se preveía un coste de ejecución de 3.250.577,13 euros (el 58,7% subvencionado por el Gobierno central), mientras que ahora, en el informe del departamento citado, consta lo siguiente: «Dado que el coste de ejecución de las obras más los honorarios de proyecto y dirección de las mismas superan los costes anualmente previstos inicialmente en el presupuesto del IMV para 2018 y 2019, y que aquellos superan los porcentajes que legalmente establece la legislación presupuestaria en los gastos plurianuales, es necesario que el Ayuntamiento Pleno autorice expresamente el aumento de los mismos en los ejercicios de ejecución de la actuación», y se añade que ello es un paso imprescindible para iniciar el expediente de contratación de las obras. El gasto previsto entre 2018 y 2021 es de 3,59 millones de euros, un incremento importante.

El gasto se divide de la siguiente forma: 300.230 euros en 2018, 1,58 millones de euros en 2019, 1,33 millones en 2020 y 381.099 euros en el ejercicio 2021.

Ya en julio de 2018, el Consistorio informó de que avanzaba en la tramitación para sacar a licitación la segunda fase de las obras, después de que la Junta de Gobierno Local y el Pleno aprobasen adaptar el Plan Cuatrienal de Inversiones del IMV, una vez recibida la propuesta de resolución definitiva de la subvención que concedería Fomento con cargo al 1,5 por ciento cultural. El Gobierno (con las cuentas de julio, no las aprobadas ahora) inyectará 1,9 millones de euros y el Ayuntamiento, 1,34 millones, el 41,3% del coste de ejecución, ascendiendo la inversión total a 3,25 millones de euros.

Ya se inauguró en enero pasado la primera fase del Convento de San Andrés, santo y seña del barrio del Perchel y a la espalda de la iglesia del Carmen, tras dos décadas de abandono. El enclave data del siglo XVI y en él pasaron su última noche los héroes liberales ajusticiados por Fernando VII en las playas de San Andrés en 1831.

En la primera fase se recuperó el refectorium del antiguo convento, donde estuvo encarcelado el general Torrijos, espacio que se dedica a exposiciones del Área de Cultura, que a su vez cooperará con la Asociación Torrijos para dedicar buena parte del inmueble a un centro de interpretación histórico dedicado a la memoria del héroe liberal. La superficie es de 238,20 metros cuadrados formados por una sala abovedada, vestíbulos y aseos. También se renovó un edificio existente de planta baja más dos ocupado ahora por la Fundación del Carnaval, además de haberse recuperado una plaza para el espacio urbano de 250 metros cuadrados (plaza de la Libertad). El presupuesto de la primera fase ascendió a 1,14 millones de euros.

La segunda fase consistirá en la recuperación del resto del conjunto histórico y del patio. En el nuevo edificio se ubicarán la biblioteca Jorge Guillén (775 metros cuadrados), la cofradía del Carmen (453 metros cuadrados), un salón de actos (250 metros cuadrados), así como otras salas, dependencias de usos comunes y un patio. La superficie total será de 2.335 metros cuadrados. El alcalde, Francisco de la Torre, vaticinó que la obra tardaría en estar concluida en un año y medio. Demófilo Peláez es el autor del proyecto.

El convento es de titularidad municipal y tiene especial relevancia. Formaba un todo con la iglesia del Carmen y se encuentra al sur del Perchel, barrio que quedó dividido en dos tras la transformación urbana que supuso la apertura de la Prolongación de la Alameda. Es uno de los primeros ensanches extramuros de la ciudad, que estaba necesitada de expansión a causa del crecimiento de población en el siglo XVI.

Historia del convento

Fueron los carmelitas descalzos quienes levantaron este convento en el siglo XVI en El Perchel, un barrio de pescadores que acogió a Fray Gabriel de la Concepción, el cual en 1584 fundó el edificio con permiso del corregidor Diego Ordóñez de Lara y del obispo Francisco Pacheco de Córdoba.

En sus inicios, fue convento de clausura y pasó a ser luego hospital, enfermería e incluso cuartel. Con la desamortización de Mendizábal se vendieron las diferentes estancias del convento. Precisamente los diferentes usos que han tenido cada una de las estancias que lo componían han condicionado su estado de conservación. De hecho, apenas se conservan piezas, decoraciones o elementos de la vida conventual.

Sus muros encierran historias como el fusilamiento del general Torrijos y sus 49 compañeros, que fueron retenidos en el refectorium del convento y fusilados a la mañana siguiente en las playas de la Misericordia. Tanto la iglesia como el convento son Bienes de Interés Cultural (BIC).