Si algo bueno trae la Navidad es esa inquietud por ser mejor persona, ese espíritu solidario y esas ansias por ayudar a los demás. Y esta noche el encendido del alumbrado navideño en Málaga inaugura esta época del año que cautiva a muchos. Por lo que hoy hay una gran oportunidad para que la mezcla de ilusión navideña y altruismo se unan en una campaña esencial para los bancos de alimentos: la Gran Recogida. Desde esta mañana, en el horario comercial de los 343 establecimientos de la provincia malagueña que participan, un total de 4.000 voluntarios en turnos de cuatro horas se alternan con un objetivo claro, conseguir recaudar 650.000 kilos de alimentos en dos días.

En total, el presidente de la Federación de Alimentos de Andalucía, Ceuta y Melilla, Pedro Mariscal, especificó que esperan alcanzar los 2,7 millones de kilos de alimentos para seguir colaborando con las más de 1.000 asociaciones que atienden a los sectores más desfavorecidos de la sociedad. Los alimentos más solicitados este año son aceite, leche y alimentos precocinados en latas o botes de cristal porque facilitan que las personas necesitadas que los reciben las consuman sin necesidad de añadirles algo más o calentarlos. Además, solicitan legumbres y alimentación para bebés. Uno de los motivos principales de la importancia de esta campaña radica en que lo recaudado supone en torno al 10 por ciento de los alimentos que Bancosol distribuye al año en la provincia de Málaga, donde atiende anualmente a unas 45.000 personas. Según explicó el presidente de Bancosol, Joaquín Jiménez, la crisis no ha pasado y hay muchas personas en situación de necesidad. Por ello, defendió que deben continuar denunciando la injusticia que supone el despilfarro de alimentos y la necesidad que hay. Así, instó a participar en esta séptima edición de la campaña.

En esta ocasión, el padrino es Antonio Banderas, una figura que da vitalidad a la campaña y sensibiliza a la población, según Jiménez, por lo que espera que repercuta en el resultado obtenido.